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¡Y ya van siete! Los mercados del petróleo han subido por séptima semana consecutiva y ya superan el 15% desde el 1 de enero de 2022. Nada parece poder frenar esta presión alcista, que ahora empuja a los especuladores a abrir posiciones largas en contratos de futuros con un precio de entrega de 100 dólares, o incluso 125 dólares para diciembre de 2022. En otras palabras, muchos inversores ven el petróleo por encima de los 100 dólares este año. En cuanto a los catalizadores a corto plazo, el acontecimiento de la semana fue, por supuesto, la reunión de la OPEP+, que finalmente ofreció poco respiro al mercado. La organización ampliada programó un nuevo aumento de 400.000 barriles diarios para marzo, pero los operadores no dan crédito a este esfuerzo debido a las dificultades de la OPEP+ para cumplir sus compromisos de producción adicional. El crudo Brent cotiza a 92,7 dólares, frente a los 91,3 dólares del WTI, la referencia estadounidense.
El oro subió un poco la semana pasada, hasta los 1.817 dólares, pero no consiguió provocar un repunte, a pesar del aumento de la volatilidad en los mercados de renta variable, que podría haber impulsado a los inversores a buscar refugio en activos seguros. La subida semanal tuvo más que ver con la caída del billete verde, que hizo más atractiva la onza de oro para los inversores "internacionales". La plata se mantuvo sin cambios, a 22,9 dólares la onza. En cuanto a los metales industriales, esta semana no ha ocurrido nada muy emocionante debido a la ausencia de los operadores chinos, que han abandonado el mercado por el Año Nuevo Lunar. Por ello, los volúmenes de negociación y las variaciones se mantuvieron reducidos. Sin embargo, los precios del aluminio se suavizaron, estabilizándose por encima de los 3.000 dólares, gracias al aumento de los suministros de gas ruso a Europa, que alivió la presión sobre las fundiciones europeas.
En cuanto a las materias primas blandas, los precios del trigo y el maíz cayeron en Chicago a 771 y 636 centavos el bushel, respectivamente. El cacao, por su parte, siguió avanzando hasta los 2.668 dólares la tonelada, una subida impulsada por la robusta demanda, mientras que la oferta sigue limitada por la perspectiva de una modesta cosecha en Costa de Marfil debido a un clima anormalmente seco.
Fuente: MarketScreener
