El fabricante de aviones estadounidense no ha respaldado públicamente el llamado diseño de rotor abierto o de ventilador abierto -en el que las palas de los motores están expuestas- anunciado el año pasado por CFM International, una unión transatlántica entre General Electric y Safran.

Sin embargo, el vicepresidente de desarrollo de productos de Boeing lo hizo con cautela al margen de una reunión informativa celebrada esta semana sobre su banco de pruebas de tecnología de vuelo.

"Cualquier herramienta que nos ayude a mejorar el rendimiento medioambiental es algo que merece la pena estudiar", dijo a los periodistas Mike Sinnett, vicepresidente de desarrollo de productos de Boeing.

"El rotor abierto de hoy es algo muy diferente a lo de hace 20 años. Hay cosas en ese motor que son muy interesantes. Y no diría que nunca pondríamos un rotor abierto en un avión", dijo Sinnett.

El emparejamiento de los motores y los futuros diseños de los fuselajes se considera la decisión más crucial de la industria aeroespacial y define la forma en que se desarrollarán los productos durante 30 o 40 años.

El año pasado, CFM desveló sus planes https://www.reuters.com/business/aerospace-defense/ge-safran-develop-new-jet-engine-under-extended-jv-2021-06-14 para probar un motor a reacción de palas abiertas que puede reducir el uso de combustible y las emisiones en un 20%. El motor "RISE", posicionado como posible sucesor del modelo "LEAP" utilizado en el Boeing 737 MAX y en algunos Airbus A320neo, tendrá un diseño de rotor abierto y podría entrar en servicio a mediados de la década de 2030.

El sistema contendrá propulsión híbrida-eléctrica y podrá funcionar con combustible 100% sostenible o con hidrógeno, una fuente de energía favorecida por Airbus para futuros conceptos.

Boeing ha indicado que no tiene prisa por un nuevo avión. El asediado fabricante de aviones está absorbido por problemas de certificación e industriales en toda su cartera de aviones de pasajeros, así como por un balance cargado de deudas.

Este mes, el director ejecutivo de Boeing, Dave Calhoun, dijo en una conferencia que pasarían "al menos un par de años" antes de que las herramientas de fabricación digital estuvieran lo suficientemente maduras para apoyar un nuevo programa de aviones.

Sinnett había presentado antes la última entrega del ecoDemonstrator de Boeing, un banco de pruebas de tecnología en vuelo para los avances en materia de eficiencia, como los biocombustibles, el agua reciclada de los lavabos y las pantallas de información portátiles para los pilotos.