El regulador antimonopolio de Australia rechazó el martes un compromiso de Google, propiedad de Alphabet Inc, que pretendía abordar las preocupaciones sobre la competencia en relación con su prevista adquisición del fabricante de trackers de fitness Fitbit por 2.100 millones de dólares.

Este hecho se produce en un momento en el que Google sigue en conflicto con el gobierno australiano por una serie de cuestiones, entre las que se incluyen las leyes propuestas que convertirán a Australia en el primer país del mundo en obligar a Google y Facebook a pagar por las noticias procedentes de los medios de comunicación locales.

En junio, la Comisión Australiana de la Competencia y el Consumidor (ACCC) expresó su preocupación por el acuerdo de Fitbit, advirtiendo que la adquisición de Google le daría demasiados datos de las personas, lo que podría perjudicar la competencia en los mercados de la salud y la publicidad en línea.

Google había tratado de disipar esas preocupaciones ofreciendo un compromiso ejecutable por los tribunales de que se comportaría de determinadas maneras con los fabricantes de wearables rivales, no utilizaría los datos de salud para la publicidad y, en algunas circunstancias, permitiría a las empresas competidoras acceder a los datos de salud y fitness.

"Aunque somos conscientes de que la Comisión Europea aceptó recientemente un compromiso similar de Google, no estamos convencidos de que un compromiso de comportamiento a largo plazo de este tipo en una industria tan compleja y dinámica pueda ser supervisado y aplicado eficazmente en Australia", dijo el presidente de la ACCC, Rod Sims, en un comunicado.

El regulador también señaló que otras autoridades de la competencia, incluido el Departamento de Justicia de EE.UU., aún no se han pronunciado sobre el acuerdo.

La ACCC dijo que continuaría su investigación y fijó una nueva fecha de decisión para el 25 de marzo de 2021.

El regulador también tiene abiertas investigaciones sobre la tecnología publicitaria y las tiendas de aplicaciones móviles, con informes previstos para enero y marzo, respectivamente, centrados en el rápido crecimiento del poder de mercado de los gigantes de Internet.