Ninguna empresa privada ha construido una estación espacial. Sierra está trabajando con Blue Origin de Jeff Bezos para construir una, llamada Orbital Reef, en competencia con otros programas de empresas como Lockheed Martin y Axiom Space.

"Es una de las muchas consideraciones", dijo la presidenta de Sierra Space, Janet Kavandi, sobre una oferta pública, hablando con Reuters en el Congreso Astronáutico Internacional de París. Añadió que la empresa puede optar por otra ronda de financiación, pero que no se ha tomado ninguna decisión.

Se negó a discutir si la empresa consideraría una oferta pública inicial tradicional o una sociedad de adquisición de propósito especial (SPAC).

Una ronda de financiación de 1.400 millones de dólares el año pasado, que valoró la empresa en 4.500 millones de dólares, permitió a Sierra Space duplicar su plantilla hasta casi 2.000 trabajadores, acercarse a la finalización de su avión espacial Dreamchaser en 2023 y ampliar las pruebas en tierra de un hábitat hinchable fundamental para el concepto Orbital Reef.

También han ayudado los multimillonarios propietarios de Sierra Nevada, Fatih y Eren Ozmen, y los contratos millonarios con la agencia espacial estadounidense NASA.

Pero una inyección de nuevos fondos permitiría a Sierra Space acelerar el desarrollo del Arrecife Orbital y llevarlo más rápidamente al mercado, según Ken Shields, director senior de desarrollo empresarial de la empresa.

Sierra Space espera tener los primeros elementos de la estación en órbita hacia 2027.

"El coste de alcanzar objetivos espaciales ambiciosos ha descendido en la última década", afirmó Carissa Christensen, directora ejecutiva de la empresa de análisis empresarial BryceTech. "Aun así, desarrollar vehículos y plataformas espaciales es una cuestión de cientos de millones a, más típicamente, miles de millones de dólares, especialmente para sistemas humanos".

Entre los clientes de las estaciones espaciales privadas se encontrarían turistas adinerados e investigadores académicos financiados con subvenciones. También incluiría a agencias gubernamentales como la NASA y la Agencia Espacial Europea, que llevan mucho tiempo al otro lado de la mesa de negociaciones como propietarios de estaciones espaciales.

Axiom Space, con sede en Houston, también está desarrollando una estación con fondos de desarrollo de la NASA, pero los primeros elementos de ese proyecto crecerán fuera de la ISS a partir de 2024 antes de dividirse en un laboratorio independiente.

Eso puede dar a Axiom la ventaja de ser el primero, permitiéndole atraer a clientes clave en un mercado cuyo tamaño y demanda no se conocen del todo.

"No creo que se pueda exagerar su importancia", dijo Michael López-Alegría, astronauta jefe de Axiom, sobre conseguir que su estación espacial llegue primero al mercado. "Nadie sabe lo grande que es el mercado".