LONDRES (Reuters) - Barclays ha dicho a sus clientes del sector de la carne de vacuno que deben evitar la deforestación en sus cadenas de suministro sudamericanas, en un documento normativo al que tuvo acceso Reuters que endurece la postura del banco pero no llega a satisfacer las demandas de los activistas.

El banco británico Barclays ha estado en el punto de mira de los activistas por su implicación como financiador de la empresa brasileña de procesamiento de alimentos JBS , criticada por su papel en la deforestación de la Amazonia.

JBS no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

Barclays dijo en un comunicado a Reuters que "no había proporcionado financiación a entidades que realizan estas actividades desde 2021" después de "mejorar la diligencia debida y la supervisión de los clientes que participan en la producción de carne de vacuno o en operaciones de procesamiento primario en Brasil".

Las nuevas directrices del banco en materia de deforestación, en vigor desde el 1 de julio, no figuran formalmente en el orden del día de la asamblea general anual del banco que se celebrará el miércoles en Londres, pero han sido planteadad como un problema por los activistas.

La presión sobre las empresas para que presten más atención a la protección del medio ambiente ha aumentado desde que en diciembre se alcanzara un acuerdo histórico en una cumbre de las Naciones Unidas para proteger la biodiversidad.

Los datos oficiales mostraron la magnitud de la tarea en Brasil, donde la deforestación de la selva amazónica aumentó un 14% en marzo con respecto al año anterior.

El documento al que tuvo acceso Reuters decía que el banco exigía a los productores de carne de vacuno que prohíban la producción o el procesamiento primario de carne de vacuno que se realice o provenga de zonas de la Amazonia taladas o reconvertidas después de 2008.

También les exigía que se comprometan a mantener una cadena de suministro de carne de vacuno sudamericana libre de deforestación, tanto directa como indirecta, con total trazabilidad, para 2025 en zonas de alto riesgo de deforestación, como la Amazonia, el Cerrado brasileño y los biomas del Chaco.

Las empresas también tendrían que controlar, verificar e informar sobre los volúmenes de carne de vacuno libre de deforestación para diciembre de 2025 y contar con un compromiso regulatorio para respetar los derechos humanos en todas sus operaciones y cadena de suministro.

En términos más generales, Barclays afirmó que "no tiene apetito" por prestar servicios financieros a empresas de soja, carne de vacuno, aceite de palma, silvicultura y madera directamente implicadas en talas ilegales o actividades relacionadas, que utilicen el fuego para desbrozar o que cometan actos de violencia o explotación de las comunidades locales.

(Reportaje de Simon Jessop y Tommy Reggiori Wilkes; edición de Greg Roumeliotis y Barbara Lewis; editado en español por Flora Gómez)