Los reguladores deben equiparse con herramientas como los bonos de "rescate" para hacer frente rápidamente a una cámara de compensación de acciones, bonos o derivados en quiebra sin tener que pedir dinero a los contribuyentes, dijo el jueves el organismo de control de riesgos del G20.

Tras la crisis financiera mundial de 2007-09, los reguladores ordenaron la compensación para una gama más amplia de derivados, lo que significa que deben pasar por una cámara de compensación respaldada por un fondo de impago para garantizar la finalización de las operaciones.

Más recientemente, Estados Unidos ha adoptado normas para obligar a que un mayor número de operaciones en el mercado del Tesoro estadounidense, valorado en 26 billones de dólares, pasen por compensadores.

Como resultado de estos cambios, algunas entidades de compensación se han convertido en vitales para los sistemas financieros de más de una jurisdicción, lo que significa que su quiebra podría dañar la estabilidad financiera a menos que puedan ser estabilizadas o "resueltas", es decir, cerradas, de forma ordenada.

El Consejo de Estabilidad Financiera (CEF) dijo que su nueva norma, que se basa en orientaciones anteriores, exige que se disponga de recursos y herramientas adecuados de liquidez, absorción de pérdidas y recapitalización para mantener la continuidad de las funciones críticas de una cámara de compensación y mitigar los efectos adversos sobre la estabilidad financiera en caso de que sea necesario un cierre.

Establece siete recursos y herramientas que los reguladores deben elegir, como los bonos de "rescate" emitidos por las entidades de compensación que pueden amortizarse para cubrir pérdidas, los fondos de resolución, las peticiones de efectivo durante la resolución y los fondos propios en posición de primera pérdida en la resolución.

Los reguladores tendrán que declarar públicamente qué herramientas han seleccionado. Podría ser necesario cambiar o introducir leyes en algunos países para que los reguladores tengan acceso a dichas herramientas.

"La financiación pública temporal de la liquidez (...) sólo debería utilizarse como último recurso", afirmó el FSB.

Bolsas como LSEG, ICE, CME y Deutsche Boerse operan importantes cámaras de compensación que gestionan operaciones por valor de billones de dólares.

Las economías del G20 se comprometen a aplicar las recomendaciones reguladoras del FSB, y el organismo de vigilancia dijo que supervisaría su aplicación y publicaría sus conclusiones. (Reportaje de Huw Jones; Edición de Mark Potter )