OTE, propiedad mayoritaria y gestionada por Deutsche Telekom, pagará un dividendo de 0,5765 euros por acción, un 3,3% más que un año antes. La retribución total a los accionistas, incluido un plan de recompra de acciones, ascenderá a 425 millones de euros, declaró.

Según una política revisada a partir de 2023, OTE prevé distribuir a sus accionistas entre el 70% y el 100% del flujo de caja libre cada año, siempre que las condiciones macroeconómicas se mantengan estables, afirmó.

OTE esperaba un flujo de caja libre de unos 500 millones de euros este año.

El operador gastará unos 640 millones de euros en 2023, lo mismo que el año pasado, para ampliar sus redes de fibra óptica y 5G y digitalizar aún más sus servicios, consolidando su liderazgo en el mercado, afirmó.