Según el acuerdo propuesto, Arkia se convertiría en una filial de propiedad total de El Al. A cambio, los accionistas de Arkia obtendrían una participación de entre el 10% y el 14% en El Al a través de acciones y opciones, según informó la aerolínea en una declaración reglamentaria.

Arkia, en su propia declaración, dijo que el acuerdo estipula que seguirá operando como una marca independiente.

"Todavía nos queda un largo camino por recorrer antes de que se complete el acuerdo para adquirir Arkia, que forma parte de la estrategia de El Al para expandirse a otras áreas de actividad", dijo el presidente de El Al, Amikam Ben Zvi.

Cualquier acuerdo necesitaría la aprobación del gobierno, del regulador de la competencia de Israel y de los sindicatos de las compañías.

Las empresas esperan llegar a un acuerdo vinculante 30 días después de un mes de diligencia debida. Después tendrán hasta 150 días para completar la transacción.

El Al en 2018 había intentado comprar otra pequeña compañía aérea, Israir, pero el regulador de la competencia no permitió la fusión.

Las acciones de El Al subían un 8,7% a 3,86 shekels en las operaciones de la tarde en Tel Aviv.

El Al dijo en octubre que había entablado conversaciones con Arkia sobre una posible adquisición. Ambas aerolíneas se han visto muy afectadas por la pandemia de COVID-19, con las fronteras de Israel cerradas en gran medida a los turistas extranjeros desde marzo de 2020.

A cambio de un rescate gubernamental, El Al -que recientemente ha cambiado de propietario y de dirección- se vio obligada a recortar su plantilla en un tercio, eliminar rutas y reducir el tamaño de su flota de Boeing a 29 de 45 aviones.

Arkia, propiedad privada del Grupo Nakash, tiene siete aviones y vuela principalmente en rutas nacionales y a Europa con aviones Embraer y Airbus.

El Al lleva tiempo interesado en volar a la ciudad turística del Mar Rojo, Eilat, en el sur de Israel, una ruta controlada por Arkia e Israir.