Equinor se convirtió el año pasado en el principal proveedor de gas natural de Europa después de que las exportaciones procedentes de Rusia se vieran cortadas en su mayor parte tras la invasión de Ucrania por Moscú. La empresa aumentó la producción de gas en torno a un 8% en 2022 para abastecer al continente, según Anders Opedal.

Europa recortó la demanda, aumentó la producción nacional e importó gas natural licuado (GNL) a un coste enorme en respuesta a la caída del suministro de gas ruso, que representó alrededor de la mitad del abastecimiento de la región en 2021.

Un invierno relativamente suave contribuyó a mantener las reservas de gas en niveles confortables.

"Intentar sustituir 150.000 millones de metros cúbicos de gas (ruso) es una tarea ingente. Estoy impresionado por cómo Europa ha afrontado la situación", afirmó.

De cara al futuro, Europa seguirá teniendo dificultades para asegurarse el suministro debido a la reactivación de la demanda de GNL por parte de China después de que eliminara las restricciones COVID a finales del año pasado, según Opedal.

"La misma incertidumbre que teníamos antes de este invierno se repetirá en 2024. Y probablemente también en 2025. Sólo en 2026-2027 veremos nuevos suministros energéticos significativos procedentes de EE.UU. y Qatar".

La competencia de Asia por los suministros de GNL significa que la demanda europea dependerá no sólo de sus propias condiciones meteorológicas, sino también de las de Asia.

"El tiempo en Asia puede fijar el precio del gas en Europa", dijo Opedal.

Equinor produjo más de 2 millones de barriles equivalentes de petróleo y gas en 2022, año en el que registró un beneficio operativo ajustado récord de 75.000 millones de dólares gracias a la subida de los precios del petróleo y el gas. Su objetivo es mantener una producción estable de petróleo y gas hasta 2030 y suministrar a Europa al menos 40 bcm de gas al año durante el mismo periodo, según Opedal.

Equinor tiene previsto perforar 25 pozos de exploración este año en el Mar del Norte noruego para encontrar nuevos recursos e invertir el agotamiento natural de los yacimientos de petróleo y gas.

También decidirá en primavera si da luz verde al desarrollo por 5.000 millones de dólares de un importante yacimiento petrolífero en el Mar del Norte británico, Rosebank, añadió Opedal.

La semana pasada Equinor acordó adquirir el negocio británico de petróleo y gas de la canadiense Suncor Energy por 850 millones de dólares, lo que le dará una participación del 29,9% en el yacimiento petrolífero Buzzard, así como una participación adicional del 40% en el proyecto Rosebank.

Equinor explota el yacimiento Johan Sverdrup, el mayor del Mar del Norte con una capacidad de producción de 720.000 barriles diarios (bpd). El yacimiento sufrió una interrupción el mes pasado debido a un fallo técnico en un sistema de refrigeración.

Opedal, que se incorporó a Equinor en 1997 y se convirtió en consejero delegado en 2020, afirmó también que el mercado mundial del petróleo sigue siendo vulnerable debido a la escasa capacidad de producción disponible tras años de falta de inversión.