Por Ana Mano

SAO PAULO, 31 ene (Reuters) - Una agencia encargada de patrullar las carreteras federales en Brasil ha informado de un aumento en los volúmenes de pesticidas ilegales incautados a los delincuentes en los últimos ocho años, incluyendo un récord de 358 toneladas métricas aprehendidas en 2022, cuando el país cosechó cerca de 300 millones de toneladas de granos.

Según la información enviada a Reuters por la Policía Federal de Carreteras (PRF), el herbicida Paraqua t, prohibido en 2021, y los insecticidas Tiametoxam y Benzoato de Emamectina se encuentran entre los productos químicos más comúnmente incautados por las autoridades.

El comercio paralelo de pesticidas, que representaría alrededor del 20% de todo el mercado brasileño, según un grupo de presión, pone de relieve los riesgos de la cadena de suministro a los que se enfrentan los operadores mundiales de cereales en Brasil, potencia agrícola.

Los delincuentes contrabandean, roban y adulteran los productos, según las autoridades. Y como los pesticidas adulterados se producen a partir de insecticidas, herbicidas y fungicidas "de menor valor comercial", su aplicación puede estropear las cosechas, afirma el PRF.

Cada vez más, los delincuentes utilizan estructuras en las que cuentan con empresas tapadera que organizan facturas falsas, producen etiquetas falsas, contrabandean y trasladan los productos ilegales.

El mercado paralelo ilegal también representa un peligro para la salud humana. Por ejemplo, las autoridades analizaron lotes del insecticida incautado tiametoxam que mostraban una concentración del 95% del ingrediente activo, mientras que la concentración máxima permitida en Brasil es del 50%, señaló la PRF.

El país es un mercado clave para empresas como Syngenta, Basf y Bayer.

El año pasado, la industria acogió con satisfacción una nueva ley que establece penas más severas para quienes produzcan, almacenen o envíen plaguicidas ilegales en Brasil.

(Reporte de Ana Mano; Editado en español por Aida Peláez-Fernández)