El índice de confianza de los consumidores, patrocinado por el First National Bank (FNB) y elaborado por la Oficina de Investigación Económica, se desplomó hasta una lectura de -23 puntos, desde los -8 puntos del cuarto trimestre de 2022.

El desplome del primer trimestre es el más bajo registrado desde 1994 e indica la extrema preocupación de los consumidores por las perspectivas económicas de Sudáfrica y sus finanzas domésticas, según la encuesta.

Sudáfrica viene soportando cortes de electricidad rotativos de hasta 10 horas diarias, lo que obstaculiza los negocios y el crecimiento económico de la economía más industrializada de África.

"El alarmante aumento de los cortes de electricidad desde diciembre y el deterioro concomitante de las perspectivas económicas de Sudáfrica sacudieron sin duda la confianza de los consumidores durante el primer trimestre", declaró Mamello Matikinca-Ngweny, economista jefe de FNB.

La gran mayoría de los consumidores cree que no era apropiado comprar bienes duraderos como vehículos, muebles y electrodomésticos en previsión de que el crecimiento económico de Sudáfrica en los próximos 12 meses se deteriore, según mostró la encuesta.

Los analistas afirman que los continuos cortes de electricidad en todo el país pueden estar alimentando las presiones sobre los precios.

La inflación general subió ligeramente en febrero hasta el 7% desde el 6,9% del mes anterior, según mostraron los datos el miércoles, alimentando las apuestas de que el Banco de la Reserva de Sudáfrica subiría los tipos de interés en 25 puntos básicos en su reunión de la próxima semana.