Fonterra Co-Operative Group Ltd, el mayor exportador de productos lácteos del mundo, declaró el lunes que invertirá unos 4.000 millones de dólares neozelandeses (2.720 millones de dólares) de aquí a 2030 para convertir la leche en productos de mayor valor, buscar el crecimiento y reducir las emisiones.

La empresa neozelandesa espera devolver a los inversores 1.000 millones de dólares neozelandeses en la próxima década, gracias a la venta de activos y a un previsible aumento de los beneficios, dijo su presidente y director ejecutivo en una reunión anual.

Fonterra, propietaria de las marcas Anchor, De Winkel y Mammoth, también tiene como objetivo alcanzar el estatus de carbono neto cero en 2050.

La hoja de ruta llega después de que la semana pasada la empresa obtuviera la aprobación de sus 10.000 accionistas agricultores para aplicar una nueva estructura de capital.

La empresa láctea ha visto una fuerte demanda de sus productos en medio de una oferta mundial limitada y espera que la demanda siga siendo elevada a corto y medio plazo. También está estudiando una oferta pública inicial de su negocio australiano, que podría devolver a los accionistas unos 700 millones de dólares hasta 2024.

Fonterra dijo que espera aumentar constantemente los dividendos hasta llegar a unos 40 centavos de dólar neozelandés por acción en 2030. El año pasado pagó 15 céntimos neozelandeses. (1 dólar = 1,4706 dólares neozelandeses) (Información de Shashwat Awasthi; edición de Diane Craft)