Sólo unos meses después de comenzar su carrera como presentadora de ventas en livestream en enero, Zhang Jinyu, de 28 años, antigua modelo y bloguera con un máster en gestión de la moda, había acumulado cientos de horas de emisión trabajando con marcas como YSL Beauty.

Un día en la vida de una presentadora de livestreaming como Zhang puede incluir más de seis horas hablando casi sin parar a la cámara, tiempo dedicado al peinado, al maquillaje y a los informes posteriores a la emisión.

A pesar del exigente horario, Zhang es uno de los millones de jóvenes chinos, que se enfrentan a un desempleo juvenil récord de más del 21%, que intentan forjar historias de éxito de ventas en livestreaming en plataformas como Tmall y Taobao de Alibaba y Douyin de Bytedance, el sitio hermano chino de TikTok.

"Para el livestreaming, el umbral para entrar en la industria es muy bajo. Puedo coger mi teléfono y estoy haciendo livestreaming", dijo Zhang.

"Destacar es difícil. Esta industria es muy competitiva, pero si puedes perseverar, puedes mejorar cada vez más. Creo que si puedo destacar es sólo cuestión de mi mentalidad y mi capacidad".

Zhang no está sola en su determinación de hacer de la presentación en directo una carrera.

Una encuesta realizada el mes pasado a más de 10.000 jóvenes en la plataforma de medios sociales Sina Weibo reveló que más del 60% de ellos afirmaron que estarían interesados en trabajar como influencers de Internet o presentadores de livestreaming.

La industria del livestreaming empleaba a 1,23 millones de anfitriones en 2020, según iResearch, y el auge de las ventas de livestreaming en la era de la pandemia ayudó a la industria a generar 480.000 millones de dólares de negocio en China el año pasado.

Para facilitar un panorama de livestreaming cada vez más profesional y competitivo, han surgido agencias para formar cuadras de jóvenes presentadores y conectar a los presentadores adecuados con las marcas.

Zhang trabaja con la agencia Romomo, con sede en Shanghai, una rama del socio de marca Buy Quickly, que ayuda a vincular a empresas como Lancome y Under Armor con sus 150 presentadores a tiempo completo.

"Hoy en día, el livestreaming es uno de los métodos de comunicación más importantes para las marcas internacionales con las que trabajamos", afirma Shining Li, vicepresidenta de Romomo. "No sólo aumenta las ventas, sino que también ayuda a las marcas a promocionar sus valores de marca y sus productos de una manera muy eficaz".

De hecho, la forma en que las marcas enfocan el livestreaming en China también ha evolucionado rápidamente. Desde un enfoque inicial centrado en las ventas masivas a través de grandes descuentos, la narración de historias y el compromiso del consumidor a más largo plazo se han convertido cada vez más en el objetivo.

Para la presentadora de livestream Shi Jianing, de 28 años, construir una relación con los consumidores con los que se comunica durante las sesiones de emisión para marcas como Hugo Boss es clave para el éxito de ventas.

"Somos como amigos de los consumidores", afirma. "Si puedes comunicarte con cierta afinidad personal, eso genera una especie de confianza, y esa relación hace que el consumidor quiera llevar a cabo la venta". (Reportaje de Casey Hall; edición de Robert Birsel)