El conglomerado noruego, que opera en los sectores de defensa, marina, ingeniería y tecnología, ha realineado perfectamente su cartera de negocios.
Kongsberg es fabricante de sistemas antiaéreos NASAMS y se encarga del mantenimiento de los aviones F-35 de la OTAN. También se dedica a la producción de petróleo y gas en alta mar, ya que Noruega ha estado trabajando el doble para compensar el cierre de la grifería rusa.
Los demás segmentos de actividad del grupo también funcionan bien. Así lo atestiguan los resultados semestrales publicados ayer: en el primer semestre, además de una sana cartera de pedidos, las ventas consolidadas aumentaron un 28%, mientras que el margen de explotación alcanzó el 11%.
Estos niveles de rentabilidad no se alcanzaban desde hace diez años. Como hemos dicho, están ligados a los nuevos ciclos que se abren en defensa y offshore tras una década de atonía, así como a una posición competitiva muy privilegiada en el mercado interior noruego, donde la competencia se mantiene a raya.
También hay que mencionar las adquisiciones, bien pensadas, bien pagadas e igualmente bien integradas, del grupo finlandés de defensa Patria -que sigue perteneciendo a medias al gobierno finlandés- y de las actividades marítimas de Rolls-Royce.
Estas transacciones han contribuido muy positivamente a los recientes resultados operativos y financieros del grupo. Las ventas de Kongsberg deberían alcanzar los 3.500 millones de euros el año próximo, con un margen neto de alrededor del 10%.
Este último, en comparación, es superior al de Thales y similar al de Lockheed Martin.
A los niveles de precios actuales, la valoración bursátil representa un múltiplo de alrededor de x20 del beneficio previsto para el próximo año. Es la primera vez en mucho tiempo que la empresa noruega obtiene un múltiplo semejante para un negocio en crecimiento.
El Director General, Geir Håøy, lo considera totalmente legítimo, ya que tiene la intención de aprovechar la muy sólida posición financiera del grupo para proseguir la estrategia de crecimiento externo que tanto éxito ha tenido hasta ahora.
Kongsberg Gruppen ASA está especializada en el desarrollo, fabricación y comercialización de equipos y sistemas tecnológicos para las industrias marítima, petrolera y del gas, de defensa y aeroespacial. Las ventas netas se desglosan por familias de productos como sigue - sistemas para buques mercantes y perforación en alta mar (49,2%): sistemas de posicionamiento, seguimiento y navegación por satélite, sistemas de automatización de procesos, sistemas de comunicación submarina, equipos de manipulación, etc; - sistemas de defensa y aeroespaciales (39%): mando y control, vigilancia y reconocimiento, comunicación táctica, estaciones de armas operadas a distancia, sistemas de misiles de largo alcance, estructuras de aviónica y productos de materiales compuestos, etc; - soluciones para la gestión sostenible de los recursos marinos y la vigilancia del cambio climático (7,9%): principalmente para operaciones en alta mar, pesca, investigación marina, operaciones marítimas, producción de energía basada en los océanos; - otros (3,9%): incluye soluciones digitales para los sectores petrolero, gasístico y marítimo. Las ventas netas se distribuyen geográficamente de la siguiente manera: Noruega (19,8%), Europa (31%), Norteamérica (23,9%), Asia (18,9%), Australia (3,7%), Sudamérica (1,8%) y África (0,9%).