El magnate italiano de la construcción Matterino Dogliani está considerando presentar una oferta por una participación de control en el operador de autopistas Autostrade per l'Italia (Aspi), según informó Bloomberg el lunes, citando fuentes anónimas con conocimiento del asunto.

La empresa familiar de Dogliani, Fininc, está estudiando asociarse con una firma de inversión internacional para realizar una oferta amistosa de unos ocho mil millones de euros (8.400 millones de dólares) que valoraría Aspi en unos 20.000 millones de euros, incluida la deuda, según el informe.

De llevarse a cabo, la operación sería una de las mayores fusiones y adquisiciones de Italia en la última década, según Bloomberg, que añade que el Gobierno italiano "podría" apoyarla.

Aspi fue comprada el año pasado a la empresa Atlantia de la familia Benetton por un consorcio liderado por el prestamista estatal italiano Cassa Depositi e Prestiti (CDP), en el que también participan los fondos internacionales Macquarie y Blackstone.

Los Benetton vendieron el activo, que gestiona unos 3.000 kilómetros de autopistas en Italia, tras recibir fuertes críticas del Gobierno por el derrumbe en 2018 de un puente de su red en Génova, en el que murieron 43 personas. (1 dólar = 0,9518 euros) (Reportaje de Alvise Armellini Edición de Keith Weir)