"Si los generadores de energía no progresan en su proyecto, tendrán que retroceder en la cola o abandonarla, dejando espacio a otros proyectos listos para progresar y conectarse", anunció National Grid ESO.

La medida forma parte de una reforma específica sobre cómo se asignan las nuevas conexiones a la red, añadió.

"Estas reformas significarán que los proyectos podrán conectarse hasta diez años antes", dijo National Grid ESO.

Hay unos 220 proyectos que deben conectarse a la red nacional de transporte antes de 2026, con un total de unos 40 gigavatios (GW) de capacidad, más del doble de la actual demanda punta británica en los meses de verano, según la empresa.

Sin embargo, sólo la mitad de ellos han obtenido el consentimiento de planificación y algunos proyectos habían retrasado sus fechas de conexión más de 14 años, añadió.

El operador de la red había escrito a aquellos que buscaban una conexión a la red pidiéndoles información actualizada sobre los progresos y los hitos del proyecto, para ayudar a identificar los proyectos inviables, según el comunicado.