Nippon Steel trasladaría su sede central en EE.UU. a Pittsburgh, donde tiene su sede el objetivo de su adquisición, U.S. Steel, si el acuerdo sale adelante, según ha declarado un ejecutivo, lo que se suma a las promesas del fabricante de acero japonés para asegurar la transacción.

La adquisición de U.S. Steel por 15.000 millones de dólares propuesta por Nippon Steel ha suscitado duras críticas en Estados Unidos, donde el presidente Joe Biden dijo la semana pasada que el activo debería seguir siendo de propiedad nacional, mientras que su oponente en la votación presidencial de noviembre, Donald Trump, prometió bloquear el acuerdo si es reelegido.

La empresa japonesa, la cuarta mayor siderúrgica del mundo, ha estado en conversaciones con los United Steelworkers (USW), un sindicato clave para Biden y Trump en las próximas elecciones de noviembre y que hasta ahora se oponía al acuerdo.

"No sólo vamos a mantener la sede de Pittsburgh -cosa que otros licitadores no podrían hacer- sino que estamos planeando trasladar la actual sede de Nippon Steel en EE.UU. de Houston a Pittsburgh", declaró el vicepresidente ejecutivo Takahiro Mori, negociador clave de Nippon Steel en el acuerdo.

En comentarios publicados en un documento de U.S. Steel a la Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. durante la noche, Mori dijo que su empresa seguía comprometida con el USW y ha ofrecido una serie de compromisos específicos sobre seguridad laboral, inversiones y otros.

Nippon Steel respetará todos los acuerdos vigentes entre U.S. Steel y el USW, no recortará puestos de trabajo, no cerrará instalaciones ni trasladará la producción al extranjero, reiteró Mori.

El acuerdo laboral básico entre U.S. Steel y el USW expira el 1 de septiembre de 2026, según una declaración de representación de U.S. Steel, y los accionistas de la empresa deben votar la propuesta de fusión el 12 de abril.

Nippon Steel planea cerrar el acuerdo a finales de septiembre, manteniendo la marca U.S. Steel, y ha conseguido un compromiso de financiación de 16.000 millones de dólares de bancos japoneses.

El grupo combinado debería tener 86 millones de toneladas anuales de capacidad de producción de acero bruto, lo que reduciría la diferencia con el primer productor mundial de acero, China Baowu Steel Group, y haría avanzar el impulso tecnológico hacia la neutralidad de carbono fijada para 2050. (Reportaje de Katya Golubkova; Edición de Lincoln Feast y Shounak Dasgupta)