SEÚLReuters) - Samsung Electronics ha solicitado exenciones fiscales para su plan de construir su fábrica de chips de 17.000 millones de dólares en Estados Unidos en Texas, en un emplazamiento distinto de Austin, donde tiene una planta de chips ya existente, según un documento presentado a las autoridades del estado de Texas.

Samsung está considerando una ubicación en el condado de Williamson, en Texas, para su fábrica de chips que consistiría en una inversión "superior a 17.000 millones de dólares" y daría lugar a 1.800 nuevos puestos de trabajo, según el documento hecho público el jueves.

En el condado de Williamson se encuentra el Distrito Escolar Independiente de Taylor, que está estudiando las exenciones fiscales que ha solicitado Samsung, según los documentos. El distrito escolar está considerando la posibilidad de limitar el valor imponible de la instalación propuesta por Samsung a 80 millones de dólares durante 10 años, en lugar del valor de mercado de 4.350 millones de dólares estimado para 2029, según el documento.

A principios de este año, Samsung había solicitado incentivos al condado de Travis, en Austin, donde tiene su actual planta de chips, para quizá construir allí la instalación de 17.000 millones de dólares.

Sin embargo, no se ha presentado ninguna documentación pública nueva para el emplazamiento en el condado de Travis desde marzo, según mostró el viernes el sitio web de la Oficina dde Cuentas Públicas de Texas.

Samsung reiteró en el documento que también está estudiando emplazamientos alternativos en Estados Unidos, como Arizona y Nueva York, así como en Corea del Sur.

En caso de que se realice la inversión, Samsung tiene previsto poner la primera piedra en el primer trimestre del año que viene y comenzar la producción a finales de 2024, según el documento.

Países como Estados Unidos han redoblado sus esfuerzos para garantizar la producción de chips, ya que la continua escasez mundial de chips semiconductores perjudica a varias industrias, incluida la del automóvil.

(Reporte de Joyce Lee y Heekyong Yang; Editado por Ana Nicolaci da Costa, traducido por José Muñoz)