MÚNICH (dpa-AFX) - En relación con los defectos del nuevo aerogenerador 5.X de la empresa energética Siemens Energy, también puede haber retrasos considerables en la entrega. La empresa está tratando de posponer la entrega de nuevos aerogeneradores terrestres de esta clase hasta siete meses, informó el lunes la agencia de noticias Bloomberg, citando a personas familiarizadas con la situación. Los costes también podrían ser mayores.

Como consecuencia, la acción cayó al fondo del Dax. Tras comenzar la sesión con ganancias, cedió rápidamente y cayó de forma significativa. Hacia el mediodía, la acción bajaba más de un 2%. Esto eleva las pérdidas del año a un 12%, lo que sitúa a la acción en el último lugar del índice principal.

Mientras tanto, continúa la investigación de las causas, según informa Bloomberg. Una parte crucial de la investigación se refiere a la cuestión de si los problemas se derivan más de las piezas suministradas o del diseño. Si se descubren fallos ocultos de diseño, los costes de reparación podrían ascender a más de la suma conocida hasta ahora de más de mil millones de euros. Un portavoz de Siemens Energy explicó que la empresa estaba "por supuesto intentando rectificar los posibles problemas". En casos concretos, esto podría suponer un ligero retraso, pero no necesariamente.

A finales de junio, Siemens Energy había retirado su previsión de beneficios para el actual ejercicio fiscal 2022/23 después de que el alcance de los problemas de calidad de las turbinas terrestres, tanto de los diseños más antiguos como de los más recientes, resultara ser mayor de lo que se pensaba. Las perspectivas de beneficios no habían sido rebajadas por la dirección en torno al CEO del Grupo, Christian Bruch, hasta mayo, y ya preveían una pérdida de cientos de millones de euros. Como consecuencia, la cotización de la acción se desplomó. La empresa dará detalles sobre los costes previstos cuando presente sus cifras del tercer trimestre comercial el próximo lunes. Con un grupo de trabajo de la dirección y un comité especial del consejo de supervisión, Energy quiere trabajar en los problemas del negocio eólico y tenerlos bajo control.

El analista Akash Gupta, de JPMorgan, escribió en un estudio publicado también el lunes que mantenía su estimación de finales de junio de provisiones de hasta 1.700 millones de euros. En su modelo de cálculo, parte de la base de que Energy contabilizará unos 1.400 millones de euros en el tercer trimestre y unos 300 millones en el último.

Gupta supone que habrá poca información nueva sobre posibles fallos de diseño cuando se presenten las cifras trimestrales. Su atención, y la del mercado, se centrará por tanto en el balance. Tras retirar sus previsiones en junio, la empresa tampoco ha descartado por completo la necesidad de una ampliación de capital./nas/mne/jha/