El presidente izquierdista de Chile, Gabriel Boric, anunció la semana pasada que el control de las vastas operaciones de litio del país se transferiría con el tiempo de Albemarle y SQM a una empresa estatal separada.

La medida conmocionó a los inversores y a las empresas extranjeras y suscitó inquietud sobre la producción y el suministro de litio, un metal esencial en las baterías de los vehículos eléctricos. Chile posee las mayores reservas de litio del mundo.

El gerente de Albemarle en Chile, Ignacio Mehech, y el vicepresidente de Corfo, José Miguel Benavente, discutieron el plan del gobierno, que se centra principalmente en el salar de Atacama, donde Albemarle tiene un contrato para operar hasta 2043, dijo Corfo en un comunicado.

Corfo seguirá siendo propietaria de las pertenencias mineras, mientras que la explotación se realizaría mediante contratos de arrendamiento que "incorporan gradualmente al Estado" a través de alianzas público-privadas con mayoría estatal, señaló el comunicado.

Benavente dijo que la "asociación público-privada y una posible extensión más allá de 2043" se definirían en una fecha posterior, pero agregó que el acuerdo debería beneficiar a ambas partes.

En una declaración separada emitida después de la reunión, Mehech dijo que la declaración de Boric sobre el respeto de los contratos es una "señal inequívoca al mercado que nos permite maximizar nuestro compromiso en Chile". Añadió que Albemarle, el mayor productor mundial de litio, quiere crecer en Chile y en el salar de Atacama con nuevas tecnologías.

"La nueva era del litio está en total sintonía con la estrategia del litio que ha trazado el gobierno", dijo Mehech, añadiendo que la compañía busca avanzar en su tecnología de extracción directa de litio, que es un elemento clave del plan del gobierno.

El ministro de Economía, Nicolás Grau, dijo a Reuters el lunes que el Gobierno iniciará conversaciones oficiales con ambos operadores de litio a través de la minera estatal Codelco a mediados de este año y espera tener un acuerdo antes del fin del mandato de Boric en 2026.

El lunes, el presidente ejecutivo de SQM, Ricardo Ramos, también se reunió con Corfo y dijo que la empresa chilena de litio, el segundo mayor productor mundial del metal, necesitaría 2.000 millones de dólares para poner en marcha los planes del Gobierno. El contrato de SQM expira en 2023.