Por Sean McLain en Tokio, Christopher M. Matthews en Houston y Costas Paris en Nueva York 
   THE WALL STREET JOURNAL 
 

Se han incrementado los temores por la cadena de suministro en todo el mundo, desde el sector del automóvil al de moda, pasando por el de los revestimientos para edificios o los recipientes para agujas de jeringuillas médicas, dado que las condiciones climatológicas extremas en Texas y los atascos en los puertos han agravado los problemas que ya sufrían los fabricantes debido a las perturbaciones provocadas por la pandemia.

Toyota Motor Corp, Honda Motor Co y Samsung Electronics Co han sido las últimas multinacionales en hablar de problemas, ya que los dos fabricantes de automóviles anunciaron el jueves que suspenderían la producción en sus plantas norteamericanas, en el caso de Toyota por la escasez de productos petroquímicos, cuya elaboración se ha visto afectada por la tormenta de nieve en Texas del pasado mes. Mientras, Honda habló de una combinación de problemas en los puertos, escasez de semiconductores, contratiempos relacionados con la pandemia y mala meteorología en Estados Unidos.

Samsung, el mayor fabricante mundial de teléfonos inteligentes, dijo que la grave escasez mundial de chips afectaría a su negocio este trimestre y el próximo. Koh Dong-jin, uno de los consejeros delegados de Samsung, informó a los inversores el miércoles de que abordar el desequilibrio en la oferta y demanda de los chips se había vuelto prioritario para el personal y que los ejecutivos estaban viajando al extranjero, pese a las restricciones, para tratar el tema con los socios de negocio.

Las perturbaciones ponen de manifiesto cómo se están confabulando varias fuerzas para dinamitar las cadenas de suministro del mundo, desde el aumento de la demanda de productos tecnológicos provocado por la pandemia a la acumulación de importaciones en los atascados puertos de California, pasando por los apagones en las fábricas estadounidenses debido al mal tiempo. Según ejecutivos de empresas y analistas, todo esto provoca aumentos de los costes y retrasos en numerosos sectores que afectan a los márgenes de beneficios y los precios que compañías y consumidores acaban pagando por muchos productos.

"Hemos tenido problemas para conseguir suficiente materia prima", afirmó Tom Nathanson, consejero delegado de Summit Plastics Inc, antes de predecir un posible daño duradero para el sector plástico por la pérdida de clientes.

Nathanson señaló que esta empresa de Mississippi, que fabrica láminas de plástico para todo tipo de productos, desde batas de hospital a envases, ya tenía problemas de oferta y demanda antes de la ola de frío en Texas. "Los costes se han trasladado", señaló Nathanson. "Nosotros, como consumidores, estamos notando esa escasez".

Todo esto demuestra lo complicada que está siendo la reapertura de los negocios un año después del comienzo de la pandemia y lo vulnerables que siguen siendo las cadenas de suministro.

El impacto económico a largo plazo sigue sin estar claro. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo el miércoles en la rueda de prensa posterior a la reunión de política monetaria de la institución que espera que las cadenas de suministro se ajusten a medida que se vaya acelerando el crecimiento económico. "Es muy posible, digámoslo así, que veamos surgir cuellos de botella que desaparezcan posteriormente (...) No son permanentes. No es que la parte de la oferta no sea capaz de adaptarse a estas cosas. El mercado los despejará. Aunque tardará un tiempo".

El temporal de hielo y nieve del pasado mes en Texas fue la gota que colmó el vaso. En este estado estadounidense está el mayor complejo petroquímico del mundo, que convierte petróleo y sus derivados en plásticos. Las nevadas y temperaturas gélidas de febrero provocaron apagones generalizados que obligaron a cerrar plantas, muchas de las cuales siguen sin funcionar.

"Lo que vimos con la helada es que estamos a un problema, a un fenómeno meteorológico, del endurecimiento de los ritmo de operación por temas de oferta y demanda, por lo que no hace falta mucho para que el mercado bascule", señaló Howard Ungerleider, director financiero de Dow Inc, el martes en una conferencia.

Varias de las plantas petroquímicas de Dow en Texas se vieron obligadas a cerrar durante el temporal y Ungerleider dijo que para finales de marzo estarían funcionando al 80% de su capacidad.

Agregó que los precios del plástico en Asia y Europa ya habían empezado a subir por los problemas de suministro en Estados Unidos y estimó que se tardarán más de seis meses en corregir los desequilibrios de la oferta y la demanda que provocó la tormenta de febrero.

Samsung, que también es uno de los mayores fabricantes mundiales de chips, se vio forzado a cerrar dos fábricas en Austin, Texas, el mes pasado. Estas instalaciones, que suponen cerca del 28% de la producción total de Samsung según los analistas de Citi, seguían cerradas el miércoles.

Toyota justificó los recortes en su fábrica de Kentucky por la escasez de productos petroquímicos, la cual también le ha llevado a reducir la producción de la furgoneta pickup Tacoma que fabrica en México.

Mientras, los puertos californianos de Los Ángeles y Long Beach, que gestionan conjuntamente más de una tercera parte de las importaciones en contenedores de Estados Unidos, siguen inundados de productos por la reposición de inventarios que comenzó a finales del año pasado y ha cobrado fuerza en 2021.

Los atascos, que en un momento dado obligaron a 40 buques a echar el ancla fuera de puerto a la espera de espacio en los muelles, se han reducido, pero esta semana seguía habiendo 17 buques contenedores a la espera frente a las costas del sur de California. Las congestiones se han extendido por la costa oeste y ya se registran también en el puerto de Oakland, ya que los importadores han buscado otros destinos para sortear los cuellos de botella.

"Los problemas en la cadena de suministro han sido recurrentes y nos han afectado directamente a lo largo del último año", dijo Abbie Durkin, propietaria de Palmer & Purchase, una tienda de moda femenina y accesorios en Rye, Nueva York. "Nuestro coste de transporte se ha duplicado y tendremos que subir los precios a partir de junio".

El director ejecutivo del puerto de Los Ángeles, Gene Seroka, no espera una mejoría porque se prevé la llegada de otros 18 buques al complejo portuario este fin de semana. "El volumen de importación seguirá siendo elevado durante la primavera y la parte inicial del verano", dijo el martes Seroka.

En cuanto a los semiconductores, registran escasez de suministro desde hace meses, después de que los fabricantes de coches, smartphones, ordenadores, tabletas y televisiones infravaloraran las expectativas durante la pandemia y antes de que el fuerte crecimiento de los pedidos tomara por sorpresa a los fabricantes de chips.

General Motors Co, Ford Motor Co y Nissan Motor Co han anunciado ya recortes de la producción o cierres temporales de plantas debido a la escasez de chips. Estas medidas pueden notarse en los balances de las empresas porque los fabricantes anotan los ingresos cuando envían un vehículo de la fábrica al concesionario. Muchos concesionarios tienen escasez de inventario, por lo que quienes quieren comprar un coche se ven obligados a buscar el modelo deseado y pagar más cuando lo encuentran porque vendedores y marcas han retirado los descuentos.

--Dan Strumpf y Austen Hufford contribuyeron a este artículo

-Escriba a Sean McLain a sean.mclain@wsj.com, Christopher M. Matthews a christopher.matthews@wsj.com y Costas Paris a costas.paris@wsj.com

Versión española de María Elsa González maria.gonzalez@dowjones.com

Editado por MVP

(END) Dow Jones Newswires

March 18, 2021 09:18 ET (13:18 GMT)