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Alemania, la mayor economía de Europa, depende en gran medida del gas ruso para alimentar su economía orientada a la exportación y para calentar los hogares. Pero el país se ha preparado para un posible cierre total de los suministros rusos si Moscú intensifica el uso del gas como arma económica contra Occidente mientras libra la guerra en Ucrania.
¿Un parón temporal?
Los flujos de gas ruso, ya reducidos con respecto al año pasado, se redujeron aún más a través del gasoducto Nord Stream 1 el mes pasado, y Berlín ha pasado a la segunda de las tres fases de su plan de suministro de emergencia.
Los líderes del sector y los economistas se preguntan cómo le irá a Alemania en los próximos meses y más allá, y dónde es especialmente vulnerable.
Alemania es conocida por sus coches, y sus máquinas-herramienta llenan las fábricas de toda China, pero los sectores que probablemente se verán más afectados son también sus industrias del vidrio y la química.
He aquí seis gráficos que ilustran la exposición de Alemania:
1. Rendimiento más lento
El gasoducto Nord Stream 1 desde Rusia a través del Mar Báltico es la ruta de gas directa más importante hacia Alemania. Antes de que comenzara el mantenimiento, los flujos ya se habían reducido al 40% de la capacidad, alegando Rusia problemas en las turbinas y sanciones.
Se teme que, tras el periodo de mantenimiento, la tubería se cierre definitivamente. En este caso, las cavernas de almacenamiento no se llenarían a tiempo para la temporada de calefacción de invierno, que comienza en tres meses.
2. Gas a Europa
No se trata sólo de Alemania. Los flujos de gas hacia Europa también se reducen en las rutas de Rusia a Eslovaquia, la República Checa y Austria a través de Ucrania y en otra ruta que pasa por Bielorrusia y Polonia.
3. La caída de Uniper
El descenso del gas y la limitación de los precios para los consumidores han presionado a los proveedores de energía, como la empresa alemana Uniper, que está en conversaciones con el gobierno para un posible rescate.
La situación de Uniper es, hasta el momento, el ejemplo más llamativo del efecto de la guerra en las empresas alemanas.
4. Ventas de gas por grupo de clientes
La industria alemana, que incluye a titanes como Volkswagen y Siemens, es el mayor consumidor de gas, pero la mitad de los hogares, que se calientan con gas, no se quedan atrás.
Los planes de contingencia incluyen dar prioridad a los hogares en caso de que el Estado se vea obligado a racionar, junto con los hospitales y los servicios esenciales, pero también se ha pedido a los hogares que participen en programas de ahorro.
5. Consumo de gas por industria
De las industrias que consumen gas para sus procesos, el sector químico alemán es el mayor consumidor. Según Moody's, sólo BASF utiliza el 4% del gas alemán en su planta de Ludwigshafen.
"En un escenario de menor disponibilidad de gas, los productores europeos de productos químicos podrían enfrentarse al menos a dos inviernos con un suministro de gas restringido", dijo Moody's en una nota de investigación, añadiendo que los costes también aumentarían.
6. Las industrias más afectadas
En el peor de los casos, un cierre total de las exportaciones de gas natural ruso podría costar a Alemania un 12,7% de sus resultados económicos en el segundo semestre de 2022, según la asociación industrial bávara vbw. Esto se traduciría en 193.000 millones de euros de pérdidas económicas totales.
Aunque Alemania sea famosa por sus coches, las industrias que probablemente se verán más afectadas por la falta de gas son la del vidrio, la siderurgia, la cerámica, la alimentación y la imprenta, con importantes repercusiones en otros sectores.
