Un comunicado de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Guerrero dijo que los restos fueron encontrados en un Volkswagen abandonado en un bulevar muy transitado en el pueblo de Chilapa de Álvarez.

"En Chilapa está estrictamente prohibida la venta de cristal, el secuestro, la extorsión y el robo. Esto le sucederá a cualquiera que se meta", decía el cartel que acompañaba el hecho, colgado de dos árboles, según una foto de la escena del crimen proporcionada por la policía a Reuters.

"La pena capital es la sentencia para todos estos delitos", decía el cartel.

Las seis víctimas no han sido identificadas.

Guerrero, uno de los estados más pobres de México, fue el escenario del infame secuestro y presunta masacre de 43 estudiantes que se preparaban para ser maestros en la ciudad de Iguala en 2014.

La violencia generalizada ha sacudido a México bajo la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, que asumió el cargo a finales de 2018 prometiendo pacificar el país con un enfoque menos confrontacional para hacer frente al crimen organizado.

López Obrador heredó una nación que ya se tambaleaba por una alta tasa de asesinatos. Desde que asumió el cargo, el promedio anual de homicidios está en camino de ser el más alto bajo cualquier administración mexicana desde que comenzaron los registros modernos.

Se ha enfrentado a las críticas de sus detractores por su política de seguridad, que ha denominado "Abrazos, no balas".