Las esperanzas de que la Fed frene la inflación, según el informe, "pueden depender en parte de una mayor relajación de las tensas condiciones del mercado laboral", lo que significa un probable aumento del desempleo en Estados Unidos.
"La demanda de mano de obra se ha relajado en muchos sectores de la economía, pero sigue superando la oferta de trabajadores disponibles, y las vacantes de empleo siguen siendo elevadas", señala el informe. Los aumentos salariales se habían ralentizado durante la primera parte del año, pero "siguen por encima del ritmo coherente con una inflación del 2% a largo plazo".
El informe señalaba que los préstamos bancarios se habían "endurecido notablemente" durante el pasado año y que probablemente se contraerían aún más tras la quiebra de varios bancos regionales en marzo.
Pero "a pesar de las preocupaciones sobre la rentabilidad de algunos bancos, el sistema bancario sigue siendo sólido y resistente", decía el informe. (Reportaje de Howard Schneider, Edición de Chizu Nomiyama)
