Esto podría hacer que la formación, del tamaño de Bélgica y situada en la vasta región patagónica de Argentina, casi cuadruplicara su producción desde los 291.000 bpd actuales, y rivalizara con los principales proyectos de petróleo de esquisto de EE.UU. Bakken o Eagle Ford, dijo Rystad en un informe.
Argentina ha estado dando un gran impulso al desarrollo de petróleo y gas de esquisto en Vaca Muerta, con la esperanza de reducir la dependencia de las costosas importaciones de energía en medio de la caída de los niveles de reservas de divisas, los altísimos niveles de inflación y la presión sobre el peso local.
"(Esto podría) reducir su dependencia de las importaciones y convertirse en un actor clave del mercado petrolero regional y mundial", dijo en el informe Alexandre Ramos Peon, jefe de investigación de esquisto de Rystad.
Rystad dijo, sin embargo, que Argentina necesitaba aumentar la capacidad de los oleoductos para transportar el crudo y reforzar la infraestructura de las terminales de exportación si quería enviar más al exterior. También necesitaba asegurarse de que disponía de suficientes equipos de perforación.
"Persisten grandes interrogantes, que podrían alterar nuestras perspectivas de crecimiento a largo plazo. Las limitaciones de capacidad de extracción persisten y la disponibilidad de equipos de perforación sigue siendo motivo de preocupación", afirmó.
Vaca Muerta posee las segundas mayores reservas de gas de esquisto del mundo y las cuartas mayores reservas de petróleo de esquisto. La formación es clave para las ambiciones de Argentina de convertirse en un exportador de energía, incluidos los objetivos de enviar gas natural licuado (GNL).
La empresa energética estatal argentina YPF lidera el desarrollo en Vaca Muerta, pero grandes empresas mundiales como Shell Plc , Chevron Corp, Exxon Mobil Corp y otras también están activas en la zona.
Rystad calcula que podría haber hasta 400 pozos nuevos en funcionamiento al año para finales de la década, con unas 30 plataformas activas y un ritmo medio de perforación de 1,1 pozos por plataforma al mes en la actualidad. Se necesitan más plataformas, según Rystad.
"Si no se traen nuevas plataformas a la región, el ritmo de crecimiento de Vaca Muerta se ralentizará en los próximos dos años", dijo Rystad.
