Por Nidal al-Mughrabi

EL CAIRO, 21 jun (Reuters) -Las fuerzas israelíes bombardearon Ráfah y otras zonas de la Franja de Gaza, en combates con militantes de Hamás que dejaron al menos 45 muertos, informaron residentes y el Ejército del Estado judío.

Residentes dijeron que los israelíes parecían estar intentando completar la toma de Ráfah, la ciudad situada en el extremo sur del enclave que ha sido objeto de un asalto israelí desde principios de mayo.

Las fuerzas israelíes dispararon desde aviones, tanques y barcos frente a la costa, forzando una nueva oleada de desplazamientos de la ciudad, que había estado albergando a más de un millón de desplazados, la mayoría de los cuales se han visto obligados a huir de nuevo.

El Ministerio de Sanidad de Gaza declaró que al menos 25 palestinos habían muerto en Mawasi, al oeste de Ráfah, y 50 habían resultado heridos. Los palestinos dijeron que un proyectil de tanque había alcanzado una tienda de campaña que albergaba a familias desplazadas.

Las autoridades sanitarias palestinas dijeron que al menos 45 palestinos habían muerto en ataques israelíes el viernes.

El Ejército israelí dijo el viernes que sus fuerzas estaban llevando a cabo acciones "precisas, basadas en información de inteligencia" en la zona de Ráfah, donde las tropas estaban participando en combates cuerpo a cuerpo y habían localizado túneles utilizados por milicianos. También informó de acciones en otros lugares del enclave.

Algunos residentes dijeron que el ritmo de la incursión israelí se había acelerado en los dos últimos días. Dijeron que los sonidos de las explosiones y los disparos que indicaban encarnizados combates han sido casi incesantes.

Tras más de ocho meses de guerra en Gaza, el avance israelí se centra ahora en las dos últimas zonas que sus fuerzas aún no habían asaltado: Ráfah, en el extremo sur de Gaza, y los alrededores de Deir al-Balah, en el centro.

"Toda la ciudad de Ráfah es zona de operaciones militares israelíes", afirmó Ahmed al-Sofi, alcalde de Ráfah, en un comunicado difundido el viernes por los medios de comunicación de Hamás.

"La ciudad vive una catástrofe humanitaria y la gente está muriendo dentro de sus tiendas a causa de los bombardeos israelíes", añadió.

Sofi dijo que no había ningún centro médico en funcionamiento en la ciudad y que los residentes restantes y las familias desplazadas carecían del mínimo para cubrir sus necesidades diarias de alimentos y agua.

Las cifras palestinas y de la ONU indican que pueden haber quedado menos de 100.000 personas en el extremo occidental de la ciudad, que había estado albergando a más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes de Gaza antes de que comenzara el asalto israelí a principios de mayo.

El ejército acusó a Hamás de utilizar a civiles palestinos como escudos humanos, acusación que Hamás niega.

En la cercana Jan Yunis, un ataque aéreo israelí mató el viernes a tres personas, entre ellas un padre y su hijo, según informaron los médicos.

Paralelamente, las fuerzas israelíes siguieron avanzando hacia algunos suburbios de la ciudad de Gaza, en el norte del enclave, donde se enfrentaron a milicianos dirigidos por Hamás. Los residentes dijeron que las fuerzas del ejército habían destruido muchas casas en el corazón de la ciudad de Gaza el jueves.

Más tarde, el viernes, un ataque aéreo israelí en una carretera principal de la ciudad de Gaza mató a cuatro palestinos, según los médicos.

La campaña terrestre y aérea de Israel se desencadenó cuando milicianos dirigidos por Hamás irrumpieron en el sur de Israel el 7 de octubre, matando a unas 1.200 personas y tomando a más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.

Con su posterior ofensiva, Israel ha dejado Gaza en ruinas, ha matado a más de 37.400 personas, según las autoridades sanitarias palestinas, y ha dejado a casi toda la población sin hogar y en la indigencia.

(Información y redacción de Nidal al-Mughrabi; editado en español por Mireia Merino y Javier Leira)