Los activos en dólares subieron un 0,8% hasta los 6,576 billones de dólares en el segundo trimestre, pero en realidad bajaron un 1% respecto al año anterior.

La cuota del euro subió ligeramente hasta el 19,9% en el segundo trimestre, desde el 19,8% de los tres meses anteriores. Los créditos en euros crecieron un 1% en el trimestre, pero aumentaron un 2% respecto al año anterior.

"El dólar sigue siendo la divisa dominante en el mercado de divisas y la financiación internacional. Su cuota en las transacciones de divisas extrabursátiles se ha mantenido notablemente estable", escribió Michael Langham, analista de mercados emergentes, en abrdn, en uno de sus últimos artículos sobre el futuro de la influencia de la divisa estadounidense.

Pero señaló que la cuota del billete verde en las reservas de divisas ha seguido una "tendencia gradual a la baja", cayendo más de 10 puntos porcentuales en los últimos 20 años. Gran parte de este cambio, dijo, ha sido impulsado por una rotación hacia otras divisas de mercados desarrollados, como el euro, la libra esterlina, el dólar canadiense y el dólar australiano. El renminbi chino también se ha hecho con una parte de las reservas, pero desde una base muy baja.

Dicho esto, Langham señaló que existe un listón muy alto para que los riesgos sobre el dólar amenacen su dominio.

Las reservas mundiales, de las que se informa en dólares estadounidenses, son activos de los bancos centrales mantenidos en distintas divisas que se utilizan en parte para respaldar sus pasivos. En ocasiones, los bancos centrales utilizan las reservas para ayudar a respaldar sus respectivas divisas.

El índice del dólar subió un 3,1% en el segundo trimestre, recuperándose de una caída del 0,9% en el primer trimestre. En el cuarto trimestre de 2022, el índice del dólar cayó un 7,7%.

El euro, por su parte, cayó un 3,1% en el trimestre, tras subir un 1,2% en los tres primeros meses del año. En los tres últimos meses de 2022 subió un 9,3%.