La libra esterlina cayó el martes tras conocerse que la construcción de viviendas en Gran Bretaña se debilitó en mayo y el dólar encontró un punto de apoyo.

La libra perdía un 0,18% y cotizaba a 1,241 dólares. El euro se mantenía plano frente a la libra, en 86,18 peniques.

Los datos de la encuesta mostraron que la construcción de viviendas en Gran Bretaña cayó a su ritmo más rápido desde mayo de 2020 el mes pasado, ya que las empresas constructoras lucharon contra el aumento de los tipos de interés.

El índice general de gestores de compras (PMI) del sector de la construcción se situó en 51,6 puntos en mayo, por encima de la marca de 50 que indica crecimiento, y por encima del 51,1 de abril.

Sin embargo, el titular ocultaba divergencias dentro del sector de la construcción, con un aumento de la actividad comercial y de ingeniería civil, pero un sufrimiento de la construcción de viviendas.

Chris Turner, director de mercados de ING, afirmó en una nota de investigación que Gran Bretaña se enfrentaba a una "bomba de relojería hipotecaria", con más de 600.000 titulares de hipotecas que deberán refinanciarse a tipos más altos en los próximos seis meses.

Turner dijo que esto podría llevar al Banco de Inglaterra a subir los tipos de interés menos de lo que esperan los mercados. Los operadores prevén actualmente que los tipos suban hasta alrededor del 5,4% a finales de este año, desde el 4,5% actual.

La libra subió a mediados de mayo a un máximo de un año de 1,268 dólares, ya que las presiones inflacionistas siguen siendo fuertes -lo que hace probables más subidas de tipos por parte del BoE- y las perspectivas de la economía británica han mejorado algo.

Desde entonces ha retrocedido, ya que el dólar ha encontrado el favor de los inversores debido en parte a los temores sobre el estancamiento del techo de la deuda estadounidense, ya resuelto, y en parte por los sólidos datos del mercado laboral estadounidense.

El índice dólar -que mide al billete verde frente a seis divisas- subió un 0,15% hasta 104,15.