Los índices bursátiles mundiales subieron y el dólar estadounidense cayó el jueves ante el optimismo de los inversores de que la Reserva Federal podría haber terminado de subir los tipos de interés, mientras que los rendimientos de referencia de los bonos del Tesoro a 10 años cayeron a mínimos de tres semanas.
Los inversores también valoraron la actuación del jueves del Banco de Inglaterra, que mantuvo los tipos en máximos de 15 años y subrayó que no esperaba empezar a recortarlos en breve.
El miércoles, la Fed mantuvo estables los tipos de interés, tal y como se esperaba, y aunque su presidente, Jerome Powell, dejó la puerta abierta a un mayor endurecimiento, también hizo un guiño al impacto de la reciente subida de los rendimientos de los bonos en la economía.
Aunque ni la Fed ni el Banco de Inglaterra señalaron que fuera probable un recorte de los tipos a corto plazo, sólo el atisbo de luz al final del túnel tras 20 meses de incesantes subidas bastó para recargar a los alcistas.
Los rendimientos de los bonos ampliaron su movimiento a la baja desde el miércoles por el alivio que supuso que el Departamento del Tesoro de EE.UU. anunciara aumentos menores de lo esperado en la oferta de bonos del Tesoro a más largo plazo.
Los rendimientos de los bonos de referencia a 10 años bajaron por última vez 15 puntos básicos, hasta el 4,645%, tras tocar el 4,626%, el nivel más bajo desde el 13 de octubre. Estaban en camino de su mayor caída de rendimiento en un día desde marzo.
En bolsa, el índice Dow Jones subió 389,08 puntos, o un 1,17%, hasta los 33.663,66, el S&P 500 ganó 62,04 puntos, o un 1,46%, hasta los 4.299,9 y el Nasdaq Composite sumó 176,79 puntos, o un 1,35%, hasta los 13.238,25.
El índice paneuropeo STOXX 600 subió un 1,77% y el indicador MSCI de valores de todo el mundo ganó un 1,71%.
Los movimientos se produjeron tras las fuertes ganancias registradas durante la noche por las acciones japonesas.
En el mercado de divisas, el dólar bajó en general por la percepción de que los tipos estadounidenses habían tocado techo, lo que aumentó el apetito por el riesgo.
Brad Bechtel, director global de divisas de Jefferies en Nueva York, dijo que la Fed probablemente ya ha terminado de subir los tipos, pero que podía ver la justificación para endurecerlos una vez más dada la todavía resistente economía estadounidense.
"Pero al mismo tiempo, todo el mundo está viendo una desaceleración y la inflación va en la dirección correcta", dijo Bechtel.
Los mercados ven ahora una probabilidad inferior al 20% de que los tipos estadounidenses suban en diciembre.
La libra esterlina, por su parte, se mantuvo firme tras la decisión del Banco de Inglaterra. La libra subió hasta un 0,6% frente al dólar, hasta 1,2225 dólares, su nivel más alto en una semana y media. La última vez había subido un 0,2%.
El índice del dólar, que mide la cotización del billete verde frente a otras seis divisas principales, se situaba por última vez un 0,2% por debajo, en 106,25.
El bitcoin, que a veces se negocia como indicador de la asunción de riesgos, superó los 35.000 dólares y alcanzó su nivel más alto desde mayo de 2022.
Los inversores esperan con interés los resultados de Apple, que se conocerán después de la campana de cierre. Se espera que Apple, un barómetro de la demanda de los consumidores y del sector tecnológico, informe de un descenso del 1% en sus ingresos trimestrales.
Además, el viernes se publicarán los datos de las nóminas no agrícolas de Estados Unidos. Un mercado laboral ajustado se considera un factor clave en las perspectivas de los tipos de interés.
