Biden llegará al Palacio Presidencial el domingo por la tarde para recibir la bienvenida formal del secretario general del Partido Comunista, Nguyen Phu Trong, el líder más poderoso de Vietnam, y después se dirigirá a la sede del Partido, donde ambos se reunirán y después harán declaraciones públicas.

La visita se produce en un momento en el que los lazos comerciales y de inversión entre ambas naciones están creciendo y en el que una disputa territorial entre Vietnam y China, que lleva tiempo latente, se recrudece en el Mar de China Meridional. Vietnam ha nombrado a otros cuatro países "socios estratégicos integrales", la designación que se espera para EE UU: China, Rusia, India y Corea del Sur.

Destacando la creciente importancia de Vietnam como destino de "friendshoring" para las empresas tecnológicas estadounidenses, el lunes se espera que ejecutivos de Google, Intel, Amkor, Marvell, GlobalFoundries y Boeing se reúnan en Hanoi con ejecutivos tecnológicos vietnamitas y con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.

Las exportaciones de Vietnam a EE.UU. aumentaron un 13,6% el año pasado, hasta los 109.390 millones de dólares, lideradas por los envíos de prendas de vestir, calzado, teléfonos inteligentes, productos electrónicos y muebles de madera.

La visita de Biden se produce casi 50 años después del final de la profundamente impopular guerra de Vietnam entre el gobierno comunista de Vietnam del Norte, apoyado por la Unión Soviética, y el régimen de Vietnam del Sur, respaldado por Estados Unidos.

Representa "un paso notable en el fortalecimiento de nuestros lazos diplomáticos" y refleja el "papel de liderazgo" que Vietnam desempeñará en la asociación de EE.UU. en el Indo-Pacífico, declaró esta semana a la prensa el asesor de seguridad nacional estadounidense Jake Sullivan.

"Durante décadas, EEUU y Vietnam han trabajado para superar el doloroso legado compartido de la guerra de Vietnam, trabajando codo con codo para promover la reconciliación, con nuestros miembros del servicio y nuestros veteranos iluminando el camino", declaró.

Washington ha estado presionando para elevar los lazos con Hanoi a una asociación "estratégica" de una que durante la última década se ha llamado "integral". Vietnam se ha mostrado cauteloso ante el riesgo de enemistarse con China, un vecino gigante que suministra insumos clave para su vital comercio de exportación, o con Rusia, otro socio tradicional.

Vietnam está en conversaciones con otros países para mejorar y ampliar su arsenal, en su mayor parte de fabricación rusa, incluida la República Checa, y recientemente ha mantenido múltiples reuniones de defensa de alto nivel con altos cargos rusos.

La semana pasada, una comisión del gobierno estadounidense acusó a Vietnam de retroceder en materia de libertades religiosas, afirmando que el país seguía una "trayectoria similar a la de China en cuanto a su regulación y control de la religión".