El presidente turco, Tayyip Erdogan, anunció la prórroga en un discurso televisado el miércoles y fue confirmada posteriormente por Rusia, Ucrania y las Naciones Unidas.

Las Naciones Unidas y Turquía negociaron el acuerdo -que permite a Ucrania exportar grano desde los puertos del Mar Negro- por un periodo inicial de 120 días en julio del año pasado para ayudar a hacer frente a una crisis alimentaria mundial que se ha visto agravada por la guerra de Rusia en Ucrania, algo que califica de "operación militar especial".

En un principio, Moscú no parecía dispuesto a prorrogar el pacto a menos que se cumpliera una lista de exigencias relativas a sus propias exportaciones agrícolas.

Al comentar la renovación del acuerdo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, afirmó que se había logrado lo que denominó un "resultado cualificado" para Rusia en las negociaciones sobre la relajación de las restricciones a las exportaciones agrícolas rusas.

En una llamada con periodistas, dijo que se estaban elaborando diferentes escenarios en relación con la flexibilización de las restricciones a las transferencias de pagos internacionales al banco agrícola estatal ruso, una de las principales demandas de Moscú.

"En cuanto a las garantías para el banco Rosselkhoz, se están explorando varias opciones que equivaldrían a revertir su exclusión del sistema de pagos SWIFT", dijo.

"Hay ciertas esperanzas basadas en las negociaciones que han tenido lugar hasta ahora".

Pero indicó que Moscú quería ver más progresos en los próximos dos meses.

"Es muy importante comprender que el destino del acuerdo sigue estando en manos de aquellos con los que la ONU debe ponerse de acuerdo sobre la parte rusa del acuerdo", dijo Peskov.

"Se ha recorrido una cierta parte del camino - hay resultados - pero no definitivos. Intentaremos resolver este problema definitivamente en estos 60 días".

Añadió que seguían en curso las conversaciones sobre la exportación de amoníaco desde una ciudad rusa a un puerto ucraniano a través de un oleoducto.