La actividad en el sector servicios ruso creció en abril a su ritmo más lento en 15 meses, según mostró el lunes una encuesta empresarial, ya que el aumento de los nuevos pedidos perdió ritmo en medio de la atonía de la demanda.

El índice global de gestores de compras (PMI) de S&P para los servicios rusos cayó a 50,5 en abril desde los 51,4 de marzo, manteniéndose por encima de la marca de 50 que separa la expansión de la contracción.

"Aunque las empresas siguieron observando que la entrada de nuevos negocios apoyaba el aumento de la producción, algunas incidencias de unas condiciones de demanda más blandas lastraron la expansión", declaró S&P Global en un comunicado.

El total de nuevas ventas creció al ritmo más lento de la actual secuencia de expansión que comenzó el pasado enero. Las empresas afirmaron que los principales motores del crecimiento fueron la captación de nuevos clientes y las elevadas entradas de trabajo procedentes del extranjero.

"Los panelistas señalaron que la mayor demanda de clientes extranjeros por parte de los clientes existentes impulsó el repunte", afirmó S&P Global.

La escasez de mano de obra ha causado problemas en toda la economía rusa en los últimos años. Pero los proveedores de servicios consiguieron contratar nuevo personal y los retrasos en el trabajo cayeron por primera vez desde el pasado mes de julio.

"Según los informes, las empresas ampliaron sus plantillas en medio de un mayor volumen de nuevos negocios, y muchas mencionaron la contratación de personal en su mayoría a tiempo completo", afirmó S&P Global.

La confianza de las empresas en la producción futura, aunque sigue siendo positiva, cayó al nivel más bajo en nueve meses.

El jueves, una encuesta paralela mostró que la actividad del sector manufacturero ruso creció en abril al ritmo más lento en tres meses, al suavizarse ligeramente la expansión de la producción y de los nuevos pedidos. (Redacción de Lucy Papachristou; Edición de Toby Chopra)