Los proveedores de energía de toda Europa han pasado apuros ante los precios al por mayor de la electricidad y el gas, que han alcanzado niveles récord tras la invasión de Rusia a Ucrania, y muchos proveedores se han hundido al no haber cubierto, o comprado por adelantado, la energía que necesitan sus clientes.

So Energy, que es propiedad mayoritaria del grupo energético irlandés ESB y cuenta con unos 300.000 clientes, nombró en octubre a unos asesores para que le ayudaran a conseguir más dinero para superar la crisis.

"Debido al cambio en las circunstancias del mercado y al continuo apoyo de nuestro accionista mayoritario, ESB... nos complace informar de que ya no estamos explorando opciones de financiación adicionales", dijo el cofundador de So Energy, Simon Oscfort, en un comunicado.

Desde octubre, el gobierno se ha comprometido a subvencionar las facturas de electricidad de los hogares a través de su plan de garantía de precios, fijado en 2.500 libras (3.074 dólares) al año para el consumo medio hasta finales de marzo de 2023 y en 3.000 libras al año hasta finales de marzo de 2024.

Sin esto, se prevé que las facturas anuales superen las 4.000 libras el próximo año.

Los precios de la energía al por mayor también han bajado desde los máximos alcanzados en agosto, ya que Europa ha actuado para reducir la demanda de gas y encontrar alternativas para sustituir las importaciones rusas.

(1 dólar = 0,8134 libras)