El ministerio de Defensa ruso hizo esta afirmación el martes tras un ataque aéreo nocturno sobre la capital ucraniana. Dos funcionarios estadounidenses dijeron más tarde que un sistema Patriot probablemente había sufrido daños pero que no parecía haber sido destruido.

"Quiero decir: no se preocupen por el destino del Patriot", declaró a la televisión ucraniana el portavoz de las fuerzas aéreas ucranianas, Yuriy Ihnat.

Descartó la posibilidad de que un misil ruso "Kinzhal" derribara un sistema Patriot.

"Destruir el sistema con algún tipo de 'Kinzhal', es imposible. Todo lo que digan allí, puede quedar en su archivo de propaganda", dijo.

El sistema Patriot forma parte de un conjunto de sofisticadas unidades de defensa antiaérea suministradas por Occidente para ayudar a Ucrania a repeler los ataques aéreos rusos tras la invasión de Moscú el año pasado.

Se considera uno de los sistemas de defensa antiaérea más avanzados de EE.UU., incluso contra aviones, misiles de crucero y misiles balísticos, y suele incluir lanzadores junto con radares y otros vehículos de apoyo.

El presidente ruso, Vladimir Putin, ha pregonado el misil Kinzhal como prueba de que su país dispone de un material militar de primer orden.

Ucrania dijo que había derribado seis misiles Kinzhal el martes, pero Rusia lo negó. No estaba claro qué arma occidental utilizó Ucrania, y el Pentágono no hizo comentarios inmediatos.