Goldman Sachs elevó el viernes su objetivo de precio de fin de año para el índice de referencia S&P 500 a 4.500 desde su visión anterior de 4.000, citando una ampliación del repunte del año hasta la fecha que ha sido liderado sólo por unos pocos valores de gran capitalización.

El estratega jefe de renta variable estadounidense de Goldman, David Kostin, dijo en una nota a los clientes que la previsión de beneficios por acción de la firma para 2023 para el S&P 500 de 224 dólares se mantiene sin cambios y asume un aterrizaje suave para la economía estadounidense, ya que el equipo económico proyecta sólo un 25% de probabilidad de recesión en los próximos 12 meses.

Aunque la actual relación precio/beneficios de 19 es "mayor de lo que esperábamos, liderada por unos pocos valores de gran capitalización", Kostin afirmó que la "combinación de ralentización de la inflación, crecimiento saludable y elevada concentración del mercado indica que el actual múltiplo puede persistir".

Kostin cita una inesperada desaceleración del crecimiento y una inflación obstinada que provoque un giro de halcones por parte de la Reserva Federal, de la que se espera ampliamente que mantenga los tipos estables en su reunión de política de la próxima semana.