Las perspectivas de que First Quantum Minerals recupere su concesión cancelada para una lucrativa mina de cobre tras las elecciones presidenciales de mayo son escasas, según muestra una revisión de Reuters de las propuestas de las campañas y entrevistas con líderes de las protestas.

Las protestas contra la concesión de First Quantum exigiendo mayores garantías medioambientales y transparencia en las negociaciones hicieron que las autoridades no sólo anularan su contrato para explotar una de las minas de cobre más grandes y nuevas del mundo, sino que prohibieran todos los nuevos permisos de extracción de metales el año pasado.

Los comerciantes de metales y los inversores siguen de cerca el resultado de las elecciones para ver si un nuevo presidente podría ayudar a reactivar la minería en Panamá.

Ocho candidatos figuran en la papeleta electoral del 5 de mayo, y las encuestas muestran una carrera muy reñida. Entre los cinco favoritos, tres han prometido continuar con los planes de cierre de la mina Cobre Panamá, uno ha prometido un referéndum sobre el asunto y otro no ha indicado formalmente sus intenciones.

La minera canadiense perdió casi la mitad de su valor de mercado tras ser despojada de su contrato y, en marzo, la agencia de calificación global Fitch rebajó los bonos soberanos de Panamá a grado especulativo, alegando problemas fiscales y de gobernanza agravados por el cierre de la mina.

Preguntado sobre sus expectativas para la mina tras la votación, un portavoz de First Quantum se limitó a decir: "Como en cualquier jurisdicción en la que operamos, esperamos que el proceso democrático dé como resultado el candidato elegido por Panamá en unas elecciones justas, transparentes y pacíficas."

Reuters habló con líderes de cinco grupos diferentes de manifestantes. Tres grupos, incluido el principal sindicato de trabajadores del país, SUNTRACS, dijeron que no había ningún escenario en el que permitieran a las autoridades sellar una nueva alianza con First Quantum.

"La gente ya demostró en las calles que no quiere minería metálica", dijo Saúl Méndez, jefe de SUNTRACS.

Dos grupos dijeron que apoyarían un referéndum sobre el asunto, y pronosticaron que el resultado sería contrario a la minería. Una encuesta publicada por el diario local La Prensa en febrero mostró que el 90% de los panameños se opone a la minería.

Los cinco grupos expresaron su desconfianza hacia los candidatos, incluso los que se han opuesto rotundamente a la minería, diciendo que los políticos no suelen cumplir sus promesas.

"Si el presidente entrante abre esa mina sin autorización de todo el país, por supuesto que vamos a volver a las calles y al mar", dijo a Reuters Sabino Ayarza, representante de la flotilla pesquera que detuvo las operaciones de First Quantum bloqueando su puerto principal.

"Y vamos con otros pensamientos. Ya no vamos pasivamente como antes, sino agresivamente para cerrar eso".

Reuters también habló con seis expertos legales en Panamá que dijeron que aunque las leyes locales podrían permitir técnicamente cambiar las perspectivas de First Quantum en cuestión de meses, un referéndum u otro tipo de consulta para asegurar el apoyo público sería la única forma de lograrlo políticamente.

First Quantum dijo en febrero que buscaba 20.000 millones de dólares a través de un arbitraje internacional por la orden de Panamá de cerrar la mina. La minera ha solicitado dos procedimientos de arbitraje, uno en virtud del Tratado de Libre Comercio entre Canadá y Panamá, y otro vinculado a la cláusula de arbitraje del contrato cancelado. La cláusula prevé procedimientos en Miami, según la empresa.

El viceministro de Finanzas de Panamá dijo a Reuters días después del anuncio que el país está listo para defender sus intereses en la batalla legal contra First Quantum, añadiendo que el Estado demostrará a los tribunales que respeta la inversión extranjera.

Renzo Merino, del equipo soberano de Moody's, dijo que la economía de Panamá ya iba bien antes de que la mina comenzara a extraer cobre. "Panamá no ha perdido eso. Todavía tiene potencial", dijo, al tiempo que advirtió de que la recuperación podría ser lenta si las preocupaciones de los inversores se extienden a otros sectores y el país se ve obligado a pagar indemnizaciones en un arbitraje.

FAVORITOS A LA PRESIDENCIA

La minería no ha sido un gran tema de campaña.

Entre los cinco favoritos, José Raúl Mulino, que encabeza las últimas encuestas, no menciona la minería en su plan de gobierno y no ha asistido a ningún debate presidencial.

El ex presidente y candidato Martín Torrijos, que ha estado entre los tres primeros candidatos en muchas encuestas, no menciona las intenciones para la minería en su plan de gobierno, aunque dijo a Reuters en un acto de campaña que el cierre de la mina es una decisión que los panameños ya tomaron y que él piensa seguir.

Rómulo Roux prometió en su plan seguir adelante con el cierre de la mina, pero no mencionó nada sobre el futuro de la minería. No estuvo disponible para una entrevista, pero su compañero de fórmula, José Blandón, dijo a Reuters en un evento que su equipo no tiene planes de anular la prohibición de la minería.

La propuesta para el país del actual vicepresidente y candidato presidencial, José Gabriel Carrizo, aboga por una votación pública para que los panameños decidan sobre el futuro de la minería.

Las campañas de los candidatos Mulino, Roux y Carrizo no estuvieron disponibles para entrevistas para este reportaje.

La prohibición panameña de nuevas concesiones mineras de metales hizo subir los precios del cobre por temor a la oferta. Cualquier indicio de un cambio en Panamá podría volver a mover los mercados.

El candidato Ricardo Lombana, que se ha movido entre el segundo y el cuarto puesto en las últimas encuestas, fue más allá en su plan de gobierno al proponer cambiar la constitución para prohibir totalmente la minería.

"Ningún impacto económico está por encima del mandato constitucional y de la voluntad soberana. Todo el país sabe que el contrato de concesión es ilegal y que debe consumarse su cierre", declaró Lombana a Reuters. (Reportaje de Valentine Hilaire, Elida Moreno y Divya Rajagopal; edición de Denny Thomas y Claudia Parsons)