Las acciones y los bonos han caído en las últimas semanas a medida que los inversores se hacen a la idea de que los bancos centrales mantendrán los tipos de interés "más altos durante más tiempo" de lo previsto anteriormente, ya que los funcionarios tratan de exprimir la inflación de las economías.
El índice europeo STOXX 600 subió un 0,2% el miércoles, tras caer un 0,6% en la sesión anterior, en su cuarta caída diaria consecutiva.
El índice MSCI de valores mundiales apenas varió tras caer un 1,2% el día anterior. El índice ha caído un 4,5% desde principios de septiembre.
El índice Dax alemán subió un 0,05%, mientras que el FTSE 100 británico se mantuvo plano. En Asia, durante la noche, el índice japonés Nikkei 225 subió un 0,18%.
Según Jan von Gerich, analista jefe de Nordea, la causa de la reciente venta masiva de acciones ha sido la fuerte subida de los rendimientos de los bonos, ya que los operadores han recortado sus apuestas a que los bancos centrales bajarán los tipos de interés en breve.
"El último catalizador ha sido el aumento de los rendimientos de los bonos, así que si eso se estabiliza, quizá el mercado de renta variable también se estabilice", afirmó.
"La perspectiva general es que probablemente estemos cerca del máximo (en los rendimientos de los bonos), pero el impulso a corto plazo sigue siendo alcista".
El miércoles, el rendimiento de la nota del Tesoro estadounidense a 10 años bajó 5 puntos básicos, hasta el 4,507%, tras tocar el martes su nivel más alto desde octubre de 2007, en el 4,566%. El rendimiento de un bono sube cuando baja su precio, y viceversa.
También están en la mente de los inversores el inminente cierre del gobierno de EE.UU., los nuevos indicios de una recesión económica en China y la reciente subida de los precios del petróleo.
Los futuros de las acciones estadounidenses repuntaron al caer los rendimientos de los bonos, y los contratos del índice bursátil de referencia S&P 500 subieron un 0,43%. Los futuros del Dow Jones subieron un 0,35% y los del Nasdaq un 0,46%.
El Dow registró el martes su mayor caída porcentual en un día desde marzo, mientras que los tres principales promedios terminaron en sus niveles de cierre más bajos en bastante más de tres meses.
En Asia, el índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón subió un 0,12%. El índice ha bajado un 3,7% en lo que va de mes.
La salud de las empresas chinas fue uno de los focos de atención. Los beneficios de las empresas industriales chinas cayeron un 11,7% en los ocho primeros meses del año, aunque se trata de un descenso menor que la caída del 15,5% de los siete primeros meses.
"La estabilización de los beneficios industriales simplemente no es lo suficientemente significativa como para anular la preocupación por los riesgos, especialmente en el sector inmobiliario", afirmó Gary Ng, economista jefe para Asia-Pacífico de Natixis.
Mientras se extiende la tensión en el sector inmobiliario chino, Bloomberg informó de que el presidente del atribulado grupo inmobiliario chino Evergrande ha sido puesto bajo vigilancia policial.
El índice del dólar, que sigue al billete verde frente a una cesta de divisas, se mantuvo prácticamente plano en 106,2 puntos. Subió a 106,32 a principios de la sesión, su nivel más alto desde el 30 de noviembre.
El crudo estadounidense subió un 1,14% hasta los 91,42 dólares el barril. El crudo Brent subió un 0,85% hasta los 94,76 dólares por barril.
El Senado de EE.UU. dio el martes un paso adelante en un proyecto de ley bipartidista destinado a evitar el cierre del gobierno en sólo cinco días, pero la Cámara sigue paralizada por las divisiones entre los miembros republicanos.
Mientras tanto, los inversores también estaban pendientes de la intervención gubernamental en el yen japonés, después de que el martes superara la barrera de los 149 por dólar por primera vez en poco menos de un año.
