El consejero delegado de Gazprom, Alexei Miller, no estuvo en la visita de Estado del presidente ruso, Vladímir Putin, a China porque estaba manteniendo conversaciones con los dirigentes iraníes, dijo el jueves la mayor compañía de gas natural del mundo.

Gazprom, que posee alrededor del 16% de las reservas mundiales de gas y emplea a cientos de miles de personas, fue en su día uno de los imperios corporativos más poderosos de Rusia, tan poderoso que se le conocía como un Estado dentro del Estado.

Pero la pérdida de gran parte del mercado europeo debido a la guerra de Rusia en Ucrania la ha golpeado duramente.

"Alexei Miller mantuvo conversaciones con los dirigentes iraníes en las fechas de la visita de Putin a China", dijo Gazprom.

No estaba claro de inmediato de qué más estaba hablando con Irán Miller, de 62 años, un estrecho aliado de Putin que dirige Gazprom desde 2001.

Gazprom dijo el miércoles que Miller se encontraba de visita de trabajo en Irán, un importante productor de gas natural, donde Miller se reunió con el primer vicepresidente de Irán, Mohammad Mokhber, y con el ministro de Petróleo iraní, Javad Owji.

Las exportaciones de gas de Gazprom a Europa han caído a mínimos post soviéticos en medio de las repercusiones políticas de la guerra en Ucrania y después de que los principales gasoductos Nord Stream resultaran dañados por misteriosas explosiones.

Gazprom se desplomó a una pérdida neta de 629.000 millones de rublos (6.900 millones de dólares) en 2023, su primera pérdida anual en más de 20 años, en medio del menguante comercio de gas con Europa, antaño su principal mercado de ventas.

Rusia lleva años en conversaciones sobre la construcción del gasoducto Power of Siberia-2 para transportar 50.000 millones de metros cúbicos de gas natural al año desde la región de Yamal, en el norte de Rusia, hasta China a través de Mongolia.

Su capacidad sería casi tanta como la del gasoducto Nord Stream 1, ahora inactivo, bajo el mar Báltico y dañado por las explosiones de 2022.