Los líderes de Estados Unidos y Rusia intercambiaron advertencias sobre Ucrania en una llamada de 50 minutos el jueves para abordar las acciones militares rusas.

"Dejé claro al presidente Putin que si hace más movimientos, si entra en Ucrania, tendremos sanciones severas. Aumentaremos nuestra presencia en Europa, con nuestros aliados de la OTAN, y habrá que pagar un alto precio por ello", dijo Biden a los periodistas al salir de un restaurante de Wilmington, Delaware.

Biden dice que Putin acordó "tres grandes conferencias" el próximo mes con altos funcionarios para ayudar a encontrar una resolución y dijo que esperaba un progreso de esas negociaciones. Sin embargo, añadió, "dejé claro que sólo podría funcionar si se desescalaba".

Al preguntársele si Moscú se enfrenta a sanciones si mantiene las tropas en la frontera, Biden dijo: "No voy a negociar aquí en público, pero dejamos claro que no puede -enfatizar- moverse en Ucrania".

Biden hablará con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, el domingo, dijo un funcionario de la Casa Blanca a primera hora del viernes.

Reafirmará el apoyo a Ucrania, discutirá la acumulación militar de Rusia y revisará los preparativos de los esfuerzos diplomáticos para calmar la situación en la región, dijo el funcionario.

El intercambio entre Biden y Putin sienta las bases para un compromiso de menor nivel entre los países que incluye la reunión de seguridad entre Estados Unidos y Rusia el 9 y 10 de enero, seguida de una sesión entre Rusia y la OTAN el 12 de enero, y una conferencia más amplia que incluye a Moscú, Washington y otros países europeos el 13 de enero.

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, trató de sentar las bases para esas conversaciones el viernes en llamadas con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y otros, dijo el Departamento de Estado.

En las conversaciones con los ministros de Exteriores de Canadá e Italia, Blinken habló de una respuesta unida para disuadir de nuevas agresiones rusas contra Ucrania.