La indignación internacional se ha extendido por los asesinatos de civiles en el norte de Ucrania, donde se encontraron una fosa común y cuerpos con las manos atadas al borde de la carretera en Bucha, una ciudad recuperada a las fuerzas rusas cuando Moscú cambió el foco de los combates a otro lugar.

Estados Unidos ha dicho anteriormente que miembros del ejército ruso han cometido crímenes de guerra en Ucrania desde que el presidente ruso Vladimir Putin ordenó la invasión en febrero.

"Estamos rastreando y documentando las atrocidades y compartiendo información con las instituciones que trabajan para que los responsables rindan cuentas", dijo a los periodistas el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.

Price dijo que las imágenes y los informes sugieren que las atrocidades no son el acto de un soldado renegado, sino parte de una "campaña más amplia y preocupante".

A petición de Ucrania, el equipo apoyará al fiscal general de la unidad de crímenes de guerra de Ucrania, dijo Price.

"La terrible muerte y destrucción provocada por las fuerzas del Kremlin va a continuar mientras Putin siga con esta guerra sin sentido y sin provocación", dijo Price.

Rusia ha negado previamente haber atacado a civiles y ha rechazado las acusaciones de crímenes de guerra en lo que llama una "operación especial" destinada a desmilitarizar y "desnazificar" Ucrania. Ucrania dice que fue invadida sin provocación.