El Nikkei sumó un 0,22% hasta los 33.212,35 a las 0216 GMT, encaminándose a un avance semanal del 0,74%. De los 225 componentes del Nikkei, 162 subieron, 57 bajaron y seis se mantuvieron planos.
Los valores bancarios lideraron las ganancias entre los sectores industriales de la Bolsa de Tokio, sumando un 1,88%, recuperándose de las secuelas de la decisión del Banco de Japón del martes de mantener el estímulo de supresión de rendimientos y sin ofrecer pistas sobre el calendario de una salida.
El índice Topix, más amplio y con mayor peso del sector financiero, ganó un 0,45%. El subíndice de acciones de valor del Topix sumó un 0,56%, superando la subida del 0,33% del subíndice de acciones de crecimiento.
"En lugar de centrarse en la situación actual, la atención en Estados Unidos se centra en las perspectivas de un aterrizaje suave y una bajada de tipos en la segunda mitad del año que viene, y eso está apoyando a la renta variable", afirmó Kazuo Kamitani, estratega de Nomura Securities.
"En Japón, las esperanzas de que las negociaciones salariales de primavera traigan aumentos salariales que superen la inflación, y de que se pase de una inflación mala a una inflación buena, están levantando al Nikkei".
Por el momento, es probable que el Nikkei oscile entre la media móvil de 25 días en torno a 33.172 y el nivel de cierre de hace 25 días en 33.424, dijo Kamitani.
El índice registró el jueves su mayor caída en dos semanas, rompiendo una racha alcista de dos días, tras una fuerte liquidación de la renta variable estadounidense.
Los precios al consumo subyacentes de Japón subieron a su ritmo más lento en más de un año, en una señal de alivio de las presiones de los costes, según mostraron los datos.
La medida de inflación preferida por la Reserva Federal, el deflactor PCE, se publicará más tarde.
A diferencia de gran parte del mundo, los mercados japoneses estarán abiertos el lunes. (Reportaje de Kevin Buckland; Edición de Rashmi Aich)
