Funcionarios de la administración estadounidense dijeron el viernes que trabajarían para garantizar que el acceso a 3.500 millones de dólares de los activos beneficiara al pueblo afgano, en medio de llamamientos para que el dinero se utilice para hacer frente a una crisis económica cada vez más profunda desde que los talibanes tomaron el poder el año pasado.

La otra mitad de los fondos permanecería en Estados Unidos, sujeta a los litigios en curso contra los talibanes, incluidos los de los familiares de los fallecidos en los atentados del 11 de septiembre, dijeron los funcionarios.

El Da Afghanistan Bank (DAB) criticó la decisión, diciendo que sus activos habían sido invertidos en Estados Unidos de acuerdo con las prácticas internacionales, y que pertenecían al pueblo de Afganistán.

"El DAB considera que la última decisión de EE.UU. sobre el bloqueo de las reservas de FX (divisas) y su asignación a fines irrelevantes, es una injusticia para el pueblo de Afganistán", dijo el banco central en un comunicado.

"(El DAB) nunca aceptará que las reservas de divisas de Afganistán se paguen bajo el nombre de compensación o ayuda humanitaria a otros y quiere que se revoque la decisión y se liberen todas las reservas de divisas de Afganistán", añadió.

Los fondos del banco central están congelados desde que los talibanes tomaron el control del país al retirarse las fuerzas extranjeras en agosto.

Los fondos congelados, combinados con las sanciones y la caída de la financiación para el desarrollo, han hecho que la economía del país caiga en picado, desatando una crisis humanitaria.