El gobernador del Banco Central de Turquía, Hafize Gaye Erkan, declaró en las reuniones de inversores celebradas en Nueva York la semana pasada que el banco estaba preparado para tomar cualquier medida necesaria, ya que se mantenía vigilante ante los riesgos de inflación, según algunos participantes.

Según los asistentes a las reuniones del jueves y el viernes, Erkan dijo que la rigidez monetaria se mantendría el tiempo que fuera necesario para garantizar una estabilidad de precios sostenida, lo que reforzó la nueva confianza de algunos inversores en los activos turcos.

La inflación se disparó hasta cerca del 65% el mes pasado y es probable que siga subiendo hasta mediados de año, cuando se espera que empiece a bajar debido a un agresivo ciclo de endurecimiento monetario que el banco central ha dicho que está llegando a su fin.

El presidente Tayyip Erdogan nombró a Erkan, un antiguo banquero de Wall Street, para el cargo en junio para revertir los años de dinero fácil bajo su mandato que provocaron una crisis del coste de la vida.

Erkan fue citado diciendo a los inversores que el banco redujo su ritmo de endurecimiento en diciembre dado que estaba significativamente cerca del nivel requerido para establecer un curso de desinflación, y que el ciclo se completaría "lo antes posible."

Un inversor estadounidense que asistió dijo que se había ido "sintiéndose bastante bien acerca de nuestra exposición a Turquía" dada la credibilidad del nuevo equipo del banco central, especialmente de sus subgobernadores.

"Erdogan aún puede hacer estallar las cosas en cualquier momento si lo desea, pero... no hay elecciones hasta 2028. Así que hay tiempo para hacer el trabajo pesado de arreglar la economía", dijo el inversor, solicitando el anonimato, citando las normas de la reunión.

INTERÉS EXTRANJERO

El banco central declinó hacer comentarios sobre las declaraciones de Erkan, realizadas en la sede de JPMorgan en Nueva York.

Hubo unos 300 participantes, entre ellos de Fidelity, Artisan, Goldman Sachs, Blackrock, UBS y Morgan Stanley, dijeron los asistentes y los organizadores.

Reuters informó este mes de que los gigantes estadounidenses de la inversión Pimco y Vanguard regresaron al mercado turco a finales del año pasado debido a su recién descubierta ortodoxia económica.

El banco central ha elevado su tipo repo a una semana en 3.400 puntos básicos desde junio, cuando Erdogan nombró a Erkan, junto con un nuevo gabinete, para llevar a cabo un brusco giro hacia políticas más ortodoxas.

El 21 de diciembre elevó su tipo clave en 250 puntos básicos, hasta el 42,5%, y los analistas esperan en general una subida más este mes. Se espera que la inflación alcance un máximo en torno al 70%-75% en mayo antes de descender.

Los principales responsables políticos turcos no asistirán a la reunión anual del Foro Económico Mundial (FEM) que se celebra esta semana en Davos, Suiza, según declaró el lunes una persona familiarizada con los planes.