La empresa hizo estos comentarios en un comunicado dos días después de que la Agencia Nacional Ucraniana para la Prevención de la Corrupción (NACP) la incluyera en una lista negra por hacer negocios en Rusia.
A raíz de ese anuncio, las acciones de Buzzi se desplomaron hasta un 7% en la Bolsa de Milán el jueves, antes de cerrar con una caída superior al 4,5%. El viernes subían un 2% a las 1326 GMT.
"Tenemos conocimiento de una campaña difamatoria contra Buzzi Unicem lanzada desde principios de febrero con el objetivo de minar la reputación de la empresa", declaró el grupo italiano en un comunicado.
Las autoridades ucranianas y los responsables del PNCS no estuvieron inmediatamente disponibles para hacer comentarios.
Buzzi dijo que había cortado toda "implicación operativa en las actividades llevadas a cabo por la filial SLK Cement en Rusia", tal y como anunció el año pasado.
En aquel momento, dijo que también había suspendido "todas las iniciativas e inversiones estratégicas" en Rusia.
En cuanto a SLK Cement, es una "entidad domiciliada en Rusia que opera exclusivamente en ese país y, por tanto, está sujeta a la legislación nacional", dijo Buzzi.
"El pago de impuestos y la movilización de empleados al ejército no son decisiones discrecionales, sino obligaciones legales dentro de la jurisdicción rusa", añadió.
En una serie de tuits, el NACP ucraniano dijo que había añadido a Buzzi Unicem a su lista de "patrocinadores internacionales de la guerra" debido a las actividades de lo que denominó "Buzzi Rusia".
"Buzzi Rusia coopera con el Ministerio de Defensa de Rusia y suministra sus productos a las mayores empresas controladas por el Estado, como "Rosneft", cuya dirección está sometida a sanciones, y "Rosatom", que ha estado implicada en amenazas nucleares en la central nuclear de Zaporizhzhia", dijo la agencia ucraniana.
Rusia fue el cuarto mercado de Buzzi el año pasado, después de Estados Unidos, Italia y Alemania, según mostraron los resultados de la empresa el mes pasado.
A pesar de una caída en los volúmenes de ventas, los ingresos en el mercado ruso ascendieron a 290,4 millones de euros (308,72 millones de dólares), un 18,2% más de un año a otro a tipos de cambio constantes.
En comparación con una cifra global de ventas del grupo de algo menos de 4.000 millones de euros.
En Ucrania, donde el año pasado las ventas se redujeron a la mitad hasta unos 60 millones de euros, Buzzi dijo que sigue presente "a pesar de las importantes pérdidas financieras" debidas a la invasión rusa.
(1 dólar = 0,9406 euros)
