El gobierno había querido vetar hasta 9.000 millones de reales, pero decidió que eso sería políticamente difícil en un año electoral, ya que el Congreso ya aprobó el proyecto de ley de presupuesto.

El presidente Jair Bolsonaro tiene hasta hoy para firmar el proyecto de ley.

El fondo electoral, que apoyará las campañas electorales de este año, se mantendrá en 4.900 millones de reales, según tres fuentes familiarizadas con el asunto.

Dos de las fuentes dijeron que el margen para reajustes salariales de los funcionarios se mantendrá en 1.700 millones de reales, tal como aprobó el Congreso.

Esta reserva para aumentos salariales estuvo en el punto de mira esta semana, cuando los funcionarios iniciaron una huelga parcial en demanda de mayores salarios.

El año pasado, Bolsonaro dijo que sólo los funcionarios que trabajan para los servicios de seguridad recibirían aumentos salariales, lo que desencadenó protestas de otros empleados del sector público.

Bolsonaro, que buscará la reelección en octubre, aún no ha decidido qué empleados recibirán aumentos.

(1 dólar = 5,4537 reales)