Un periodista de Reuters vio cómo varios coches blindados cargaban maletas y abandonaban la sede de la misión.

La OSCE dijo en un comunicado que "ciertos estados participantes" habían dicho a sus ciudadanos en la misión que se fueran en los próximos días. No nombró a los países pero dijo que la misión seguiría con su trabajo.

La Misión Especial de Observación de la OSCE en Ucrania está desplegada en el este del país desde 2014, cuando estalló la guerra entre las tropas ucranianas y los rebeldes respaldados por Rusia. Kiev dice que más de 14.000 personas han muerto.

Dos fuentes dijeron a Reuters que Estados Unidos decidió retirar a su personal de Ucrania, mientras que Gran Bretaña trasladó a sus observadores de las zonas controladas por los rebeldes a las que están bajo control del gobierno.

Estados Unidos y otros países han instado a sus ciudadanos a abandonar Ucrania de inmediato para evitar la amenaza de una invasión rusa, diciendo que un ataque podría producirse en cualquier momento.

Rusia, que ha acumulado fuerzas militares en el norte, el este y el sur de Ucrania, ha refutado la idea de que planea atacar y ha acusado a las naciones occidentales de difundir mentiras e histeria.

Una fuente diplomática dijo que 160 miembros del personal de la OSCE estaban siendo sacados de Ucrania, incluyendo ciudadanos holandeses, canadienses, eslovacos y albaneses. Esa cifra no pudo ser confirmada inmediatamente por otra fuente.

Mykhailo Podolyak, asesor del jefe de gabinete del presidente ucraniano, declinó hacer comentarios sobre lo que, según dijo, era un asunto de la OSCE.

La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia criticó la medida de Estados Unidos y dijo que la misión estaba sucumbiendo a lo que describió como una "psicosis militar" azuzada por Washington.

La funcionaria, Maria Zakharova, instó a los dirigentes de la OSCE a evitar los intentos de "manipular la misión" y dijo que su supervisión era necesaria ahora más que nunca.

Rusia y la OSCE han tenido desacuerdos en el pasado sobre el este de Ucrania.

En septiembre, Moscú se negó a permitir que otra misión de la OSCE siguiera vigilando la frontera entre la zona controlada por los rebeldes en el este de Ucrania y Rusia. Los separatistas prorrusos bloquearon a sus observadores en su hotel de Donetsk durante una semana en octubre.

Los monitores de la OSCE de Dinamarca también abandonaron Donetsk, dijo una fuente diplomática.

En total, 21 monitores de la OSCE abandonaron la ciudad controlada por los rebeldes y otros más de 30 también tenían previsto retirarse de las zonas cercanas controladas por el gobierno, dijo una fuente diplomática.

(Esta historia corrige un error ortográfico en el titular)