Getlink, que explota el túnel ferroviario submarino que conecta Francia con Gran Bretaña, registró el jueves una pérdida neta de 123 millones de euros (145 millones de dólares), frente a la pérdida de 79 millones de euros en el mismo periodo de 2020.

El número de pasajeros que cruzaron el Eurotúnel a bordo de sus lanzaderas y en los trenes Eurostar se desplomó durante el primer semestre del año, ya que los gobiernos ampliaron las restricciones de viaje para intentar controlar la propagación de las variantes más contagiosas del coronavirus.

También pasaron menos camiones de logística debido a que las empresas hicieron acopio de existencias antes de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, aunque el tráfico volvió a repuntar en el segundo trimestre.

Los ingresos y el beneficio básico de Getlink cayeron un 12% y un 19% respectivamente, aunque ambos superaron las expectativas de los analistas encuestados por la empresa, mientras que su posición de tesorería alcanzó nuevos máximos gracias al estricto control de los costes.

"En este contexto, yo diría que nuestros resultados son satisfactorios", declaró a la prensa el consejero delegado de Getlink, Yann Leriche, quien añadió que Getlink estaba invirtiendo en la digitalización de los antiguos controles fronterizos manuales para hacer más eficiente el cruce.

"Nos estamos preparando para un aumento del tráfico", dijo. "Lo hemos visto el año pasado y lo hemos visto este año: en cuanto se suavizan las restricciones de viaje la gente hace rápidamente muchas reservas con nosotros".

Sin embargo, el grupo dijo que no podía dar una orientación financiera mientras los gobiernos no dieran un plazo estable sobre el regreso de los viajes transfronterizos.

Para contener una cuarta oleada de coronavirus, el gobierno francés ha anunciado nuevas y duras medidas, como la exigencia de un pase sanitario en los trenes de larga distancia, mientras que Gran Bretaña amplió la semana pasada las normas de cuarentena para los viajeros procedentes de Francia.

(1 dólar = 0,8480 euros)