A las 1602 GMT, el rand cotizaba a 15,9650 frente al dólar, aproximadamente un 0,8% más débil que su cierre anterior y borrando las ganancias del lunes, primer día de cotización de 2022.

Los inversores han llegado a considerar Omicrono como potencialmente menos perturbador para la economía mundial que las variantes anteriores, y la atención del mercado está ahora firmemente fijada en cuándo empezará la Reserva Federal a subir los tipos desde su mínimo de la era de la pandemia.

Con el calendario de datos económicos sudafricanos relativamente ligero esta semana, con una encuesta de gestores de compras prevista para el miércoles y las cifras de reservas para el viernes, es probable que el rand continúe siguiendo los impulsos mundiales.

La Bolsa de Johannesburgo se despertó el martes tras un comienzo apagado en 2022 un día antes, mientras los inversores buscaban rendimientos.

El índice All-share terminó con una subida del 1,8%, hasta los 75.052 puntos, y el índice de las 40 principales empresas de primera categoría cerró con una subida del 2,05%, hasta los 68.399 puntos, reflejando las ganancias registradas en Wall Street.

El repunte local estuvo impulsado sobre todo por los valores financieros y por una ganancia del 2,5% en Naspers, peso pesado del índice, que el año pasado se quedó rezagado respecto al mercado más amplio. Algunos analistas siguen considerando que las acciones sudafricanas son más baratas que las de sus homólogas, a pesar de la subida de casi el 25% registrada en 2021.