El rublo ruso se estabilizó el lunes, rondando los 97 por dólar, mientras el mercado hacía balance de la subida de tipos del viernes al 13% y tras el rescate de eurobonos rusos por valor de 3.000 millones de dólares durante el fin de semana.

El Banco de Rusia subió el viernes el coste de los préstamos por tercera vez consecutiva en respuesta a la debilidad del rublo, que se desplomó por encima de los 100 por dólar el mes pasado, y a otras presiones inflacionistas persistentes.

A las 0745 GMT, el rublo era un 0,2% más débil frente al dólar, a 96,97, y había perdido un 0,5% para cotizar a 103,43 frente al euro. Frente al yuan había cedido un 0,2% hasta 13,28.

"Los próximos dos días pueden ser decisivos para el rublo", dijo el analista de Alor Broker Alexei Antonov.

El banco central aumentó bruscamente sus ventas de divisas durante una semana a partir del 14 de septiembre, tratando de compensar la amortización prevista de eurobonos rusos por valor de 3.000 millones de dólares el 16 de septiembre.

El banco dijo que esperaba que algunos tenedores, a los que se pagaría en rublos, convirtieran a divisas.

"Vamos a ver qué parte de los fondos recibidos por los inversores nacionales se dirigirá de nuevo a la moneda extranjera", dijo Antonov, advirtiendo que no se podía excluir que el rublo volviera a 100 frente al dólar.

El crudo Brent, referencia mundial de la principal exportación rusa, subió un 0,8% hasta los 94,63 dólares el barril, su nivel más alto en 10 meses, lo que apoyó a los índices bursátiles rusos.

El índice RTS, denominado en dólares, se mantuvo estable en 1.029,1 puntos. El índice ruso MOEX, basado en el rublo, subió un 0,6% hasta los 3.170,7 puntos.

"A pesar del optimismo contenido con el que los inversores reaccionaron a la decisión (sobre los tipos de interés) del regulador, sugerimos que con los tipos altos, las pausas en el pago de dividendos y la caída de los precios de los bonos en rublos, es difícil que el mercado de valores siga creciendo", dijo el Banco de Inversión Sinara en una nota. (Reportaje de Alexander Marrow; Edición de Bernadette Baum)