El dólar australiano, sensible al riesgo, se disparó a máximos de dos semanas, mientras que el euro subió por tercer día consecutivo.
Durante el fin de semana, la Reserva Federal, el Banco Central Europeo, el Banco de Inglaterra, el Banco Nacional Suizo, el Banco de Canadá y el Banco de Japón anunciaron medidas conjuntas para aumentar la liquidez de los mercados. Esto se produjo después de que las autoridades suizas negociaran la compra de Credit Suisse por parte de UBS, pero con un enorme descuento y con enormes quitas de deuda.
La "respuesta inicial del mercado de divisas ha sido 'positiva al riesgo'", escribió Ray Attrill, jefe de estrategia de divisas del National Australia Bank en una nota a clientes, señalando la caída del yen y el repunte del australiano en particular.
El yen cayó un 0,6% hasta 132,59 por dólar, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años subió 12 puntos básicos hasta el 3,52% para comenzar la semana, alejándose del mínimo del 3,369% del jueves.
La divisa japonesa había ganado un 2,5% la semana pasada.
El dólar también se debilitó en general.
El euro sumó un 0,17% hasta los 1,06885 dólares y la libra esterlina avanzó un 0,1% hasta los 1,2190 dólares.
El dólar australiano subió un 0,3% hasta los 0,6721 $, y anteriormente tocó los 0,6743 $ por primera vez desde el 7 de marzo.
Aunque el sistema bancario es el foco de atención más inmediato de los mercados de divisas, el miércoles se avecina una reunión de la Fed para fijar los tipos de interés. Los operadores siguen opinando que es probable una subida de un cuarto de punto, aunque el sector bancario mundial sigue siendo susceptible a los riesgos de contagio.
Dicho esto, los mercados monetarios se posicionan ahora para un máximo de los tipos en mayo, en torno al 4,79%, y después 72 puntos básicos de bajada hasta finales de año.
"La renovada -y creciente- confianza en que la Fed recorte los tipos este año y mucho antes que cualquier otro banco central está evidentemente en el punto de mira por ahora", escribió Attrill de NAB.
"Sin duda, si la aversión al riesgo desarrolla una cabeza de vapor mucho mayor, esto entonces llegaría a dominar la acción del precio del USD".
En las criptodivisas, el bitcoin se tomó un respiro tras su subida a un máximo de nueve meses de 28.474 dólares el domingo. Cambió de manos por última vez a 27.888 $.
El oro bajó un 0,8% y se situó en torno a los 1.972 dólares la onza.
